Para hoy, el Juzgado tiene previsto recibir la declaración del testigo criteriado “Sirio”. / Juan Carlos Vásquez


Un supuesto grupo de exterminio, que entre enero de 2014 y diciembre de 2015 habría planificado 12 homicidios, de los cuales diez fueron consumados, enfrenta desde ayer la vista pública en el Juzgado Especializado de Sentencia “B” de San Salvador.

La Fiscalía General de la República señala a los 21 imputados, entre ellos un sargento, un cabo, tres agentes y un motorista de la Policía Nacional Civil, de haberse organizado para asesinar, en su mayoría, a pandilleros en Armenia, Sonsonate; El Congo, Santa Ana; y Ciudad Arce, La Libertad.

La fiscal del caso confirmó ayer que, además de los diez homicidios agravados, la estructura es procesada por dos homicidios tentados, una privación de libertad y un robo agravado.

“Ellos se dedicaban al sicariato y eran contratados por personas que tenían interés en quitarle la vida a algún pandillero y de esa manera ellos se organizaban para efectuar cada uno de los hechos”, sostuvo la representante del Ministerio Público.

En las pesquisas realizadas por la Fiscalía se determinó que el supuesto cabecilla del grupo de exterminio era Jenson Amaya. “Él era quien tenía la capacidad de organizar y distribuir los recursos con los que se iban a efectuar los hechos” agregó la fiscal.

Amaya es supuestamente un traficante de personas y sobre él giraba la logística y forma de operar, señala la investigación que la Unidad contra el Crimen Organizado realizó para desarticular este grupo.

Como principales aliados de Amaya se menciona a los hermanos Eduardo y José Ángel Castillo Calles, y un sobrino de ellos, de nombre Fredy Alberto Tobar Calles; además, el sargento Nelson Alfredo Lule Zepeda, el cabo Gerardo Aníbal Rivas Morales, los agentes, Fidel Antonio Galán Hernández, Víctor Manuel González Cuéllar y Élmer Aníbal Rodríguez Torres.

El último, junto a Joaquín Arévalo, alias “Gato”, un motorista asignado a la delegación de la Policía Nacional Civil de Lourdes, Colón, tenían en San Juan Opico la Cervecería Los Tres Puentes, donde, supuestamente, se planificaron algunos hechos.

Como principal prueba contra la estructura la representación fiscal ha presentado la declaración del testigo criteriado “Sirio”, quien participó en todos los hechos, los defensores pidieron ayer, vía incidental, que se anule el proceso por considerar que existe una ilegalidad en el otorgamiento del criterio de oportunidad, pero la jueza del caso se los declaró sin lugar y les dijo que eso lo debieron haber pedido en la fase de instrucción; y que en vista pública no es el momento procesal para solicitarlo.