Al ponerlos a la orden del referido tribunal, la Fiscalía General de la República solicitó que en la audiencia inicial se les decrete la detención provisional para que sigan el proceso penal en prisión por estar frente a un delito grave y porque pueden entorpecer las investigaciones.
El inspector jefe Juan Armando Huezo Grande fue detenido el pasado miércoles 30 de agosto, junto a otros siete agentes que hacían labores de bartolineros en el recinto conocido como “El Penalito”, celdas que tiene la Policía para reos procesados en los tribunales.
La Fiscalía General de la República ha incorporado como elementos de indicio, llamadas telefónicas donde supuestamente se escucha a los pandilleros hablar sobre la introducción de objetos prohibidos y las conexiones con los policías.
También se ha anexado la declaración de un testigo criteriado detenido en una requisa y quien proporcionó información sobre la forma en la que introducían ilícitos y la colaboración que proporcionaban los policías a cambio de beneficios procesales.
Según la Fiscalía, por ingresar chips y teléfonos celulares los pandilleros pagaban entre $300 y $500 por cada vez que lo hacían, de todos esos hechos el inspector jefe, como responsable de esas bartolinas estaba al tanto pero nunca lo denuncio, así lo detalla la representación fiscal.
El día de las ocho capturas, también fueron notificados por el nuevo delito cuatro integrantes de pandillas quienes eran los que supuestamente pagaban porque se les permitiera que les ingresaran los objetos, así como droga.
La audiencia será desarrollada el lunes en la mañana.