Funes ha criticado a la Fiscalía de no tener pruebas en su contra que lo incriminen. / DEM


La Fiscalía General de la República sospecha que el expresidente Mauricio Funes y sus testaferros aún tienen parte del dinero que retiraron en efectivo del Banco Hipotecario y que les está sirviendo para seguir disfrutando y seguir manteniendo el nivel de vida que llevaban años atrás.

Jorge Cortez, jefe de la Unidad de Investigación Financiera (UIF), dijo ayer en el programa de radio “Pencho y Aída” que han utilizado las herramientas legales para inmovilizar los bienes, y que al final del proceso recuperar ese dinero invertido en dichos inmuebles; hasta la fecha han detectado 14 propiedades que tienen embargos avalados por el Juzgado Quinto de Paz de San Salvador.

“Va a ser bien difícil encontrar el efectivo, sin embargo, vamos a hacer nuestro mejor esfuerzo por tratar de extinguir estos bienes adquiridos con fondos públicos y que regrese a las arcas y que se traduzca en parte de esos fondos”, sostuvo Cortez. Según las pesquisas, en el período presidencial de Funes, se sustrajeron más de $351 millones de forma ilegal.

Pero de ese monto consta información documental y testimonial de que más de $292 mil fueron retirados en efectivo por Pablo Gómez, exasistente técnico financiero de Casa Presidencial.