La prueba de ácido desoxirribonucleico (ADN) confirmó que los restos exhumados el pasado viernes en el cantón Los Hornos, del municipio de San Francisco Javier, en Usulután, son de la agente Carla Mayarí Ayala Palacios y ahora solo queda determinar la causa de la muerte, a través de un estudio antropológico que estará en dos semanas.

El hallazgo de los restos de la agente es una de las diligencias de investigación resueltas, pero las autoridades aún tienen que establecer cuál fue la razón que llevó a Juan Josué Castillo Arévalo a asesinarla, respuesta que según fuentes cercanas a la investigación la pueden dar, únicamente, los imputados, sobre todo Wilfredo Deras Hernández y Ovidio Antonio Pacheco Morales.

Otra de las pesquisas en curso es determinar el paradero de Castillo Arévalo, de indicativo “Samurai” quien luego de, supuestamente, asesinar y enterrar a la agente, desapareció y no lo han capturado.

Ayer, el fiscal general Douglas Meléndez dijo que ese no es trabajo de la institución que preside, sino de la Policía Nacional Civil (PNC) que debe responder y ponerle ante los tribunales.

Ayala Palacios desapareció la madrugada del 29 de diciembre del 2017, luego de participar en una fiesta de fin de año, en la base del extinto Grupo de Reacción Policial (GRP) y desde entonces sus familiares esperaban una respuesta. Ayer, en la sede del Instituto de Medicina Legal (IML) se les confirmó que los restos son de la agente.



La investigación

El caso Carla Ayala es una investigación que inició hace nueve meses y que llevó a girar capturas, pero estaba pendiente localizar los restos de la agente, dijo ayer el fiscal general.

En las diligencias indagatorias se han utilizado diversas técnicas de investigación y recursos tecnológicos; en el último mes se trabajó la zona del cantón Los Hornos y la semana pasada la Fiscalía pidió autorización judicial para inspeccionar una área de un terreno propiedad de un familiar de Castillo Arévalo.

Al procesar la escena se encontraron osamentas que fueron exhumadas para que Medicina Legal hiciera la prueba de ADN, y realizar el estudio antropológico que permita verificar la causa de muerte.

Para la prueba de genética el IML tenía un adelanto, ya que, en el pasado mes de abril se habían tomado muestras de sangre a parientes de la agente. “Hemos tenido una muestra efectiva del Instituto de Medicina Legal y las muestras analizadas, entregadas al IML con los restos encontrados en San Francisco Javier, resultan positivos en la identidad de la víctima Carla Ayala” afirmó el fiscal general.

Boris Cornejo, jefe del departamento de Biología Forense, dijo que desde abril y mayo ya habían recibido 28 evidencias de la víctima, entre ellas cabello y telas con restos de sangre y tras analizarlas crearon perfiles con tres familiares de la agente.

El pasado viernes, cuando les entregaron los restos óseos exhumados en San Francisco Javier, los compararon con los tres perfiles que desde mayo habían creado y obtuvieron un resultado positivo arriba del 99 %.

El fiscal general dijo que siguen verificando posiblemente el lugar donde en primera instancia fue enterrada la agente, extraoficialmente se conoció que el pasado viernes no habrían encontrado en la fosa una extremidad de Ayala Palacios.