La Fiscalía General de la República acusará el próximo lunes a Denys Edenilson Suárez Mejía, por el delito de feminicidio agravado en su compañera de vida, Rosa María Bonilla Vega, de 45 años, la doctora que fue asesinada el pasado martes 23 de enero en Santa Ana.

Previo a judicializar la muerte de la profesional, el Ministerio Público presentó cargos en contra del imputado por fraude procesal, ya que las pesquisas realizadas determinan que borró evidencia para ocultar el hecho y hacer creer a las autoridades que Bonilla Vega se había caído de las gradas de la casa.

Los dos procesos serán conocidos por el Juzgado Cuarto de Paz de Santa Ana, pero por tratarse de delitos surgidos en un solo hecho y por economía procesal se unirán en una sola causa para que la segunda etapa del proceso sea conocido por el Juzgado Especializado de la Mujer instalado en esa ciudad.

Max Muñoz, jefe de la oficina fiscal de Santa Ana, manifestó que se está en la etapa inicial de la indagación del feminicidio agravado ya que debe probarse la misoginia y la violencia económica que el imputado ejercía sobre su compañera de vida.

“Esa violencia económica que venía ejerciendo el imputado durante largo tiempo vino a desencadenar en la muerte de la misma, es lamentable que a estas alturas sucedan hechos de esta naturaleza, pero obviamente ahora que contamos con una ley especial estos hechos son castigados de manera severa, el imputado estaría enfrentando solamente por el feminicidio de la doctora hasta de 50 años de prisión”, explicó Muñoz.

 

El caso

El hecho habría ocurrido entre las 5:30 y 6:00 a.m., del pasado 23 de enero, según bitácora de llamada en el Sistema de Emergencia 911, a eso de las 6:15 a.m., se pidió auxilio para trasladar a una persona que se había caído de las gradas de la casa hacia el Seguro Social de Santa Ana.

Cuando la víctima ingresó a máxima urgencia la doctora de turno le indicó a uno de los agentes que las lesiones de la víctima no concordaban con la versión de Suárez Mejía, quien dijo que su compañera de vida se había caído de las gradas.

Minutos después que la doctora Bonilla Vega murió, la fiscalía inspeccionó la casa de la víctima y se encontró que no había coherencia entre la versión de Suárez Mejía y lo encontrado en la vivienda.

Pero una de las principales anomalía detectadas es que cuando la Fiscalía llegó a la casa de la víctima, la escena ya había sido alterada. Los agentes del 911 que trasladaron a la doctora hacia el hospital manifestaron que la sala estaba llena de sangre, pero cuando regresaron para colaborar en la inspección observaron que los rastros de sangre habían desaparecido, no obstante en la pared encontraron gotas de sangre.

Según la fiscal, Graciela Sagastume, la víctima tenía lesiones en el cuello, específicamente, señales de haber sido estrangulada, los investigadores junto a la Fiscalía detectaron, además, que el imputado presentaba rasguños en en sus hombros, axilas, manos y brazos, lo cual indica que la víctima intentó defenderse.

La Fiscalía General de la República ha ordenado como parte de las diligencias de investigación que al imputado se practiquen en Medicina Legal, peritajes psiquiátricos y psicológicos para determinar psicopatías.

 

El caso

23/01/2018

Entre 5:30 y 6:00 a.m., la doctora es vapuleada, supuestamente por su compañero de vida, y a eso de las 6:15 a.m. el Sistema de Emergencia 911 registra una llamada pidiendo auxilio para trasladar a una lesionada que secayó de las gradas.

 

29/01/2018

La oficina fiscal de Santa Ana presentará la acusación formal por el delito de feminicidio agravado contra Denys Edenilson Suárez Mejía, tras encontrar suficientes indicios que determinan que la habría asesinado a golpes.