Raúl Mijango fue llevado a un centro asistencial, ayer, por orden del juez, durante la diligencia. / Wilson Urbina


En la vista pública el testigo criteriado Carlos Eduardo Burgos Nuila, alias “Nalo”, confesó que durante la tregua tomaron la decisión de extorsionar a la empresa Arrocera San Francisco por la cantidad de $ 6 mil.

La decisión fue tomada, porque, según el testigo, las pandillas tenían claro que la tregua iba terminar y debían recuperar armas y entonces necesitaban dinero para comprarlas; fue así como optaron por extorsionar a dicha empresa.

“Nalo” señaló que la extorsión consistió en exigirle a la Arrocera San Francisco que les entregara $6 mil en producto y que cuando lograron su objetivo, vendieron los granos básicos para utilizarlos en la obtención de armas largas.

El criteriado expresó que uno de los autores directos en ese caso de extorsión fue Raúl Mijango, principal mediador de la tregua, quien respaldó a las pandillas en ese hecho delictivo.

Eso fue cometido en el año 2012 y que se reunieron en una de las oficinas que Mijango tenía como centro de operaciones durante la tregua, según dijo ante el juez el criteriado.

La extorsión fue planificada, específicamente, en el local que está ubicado cerca del Salvador del Mundo; de ese hecho también tuvieron conocimiento los cabecillas que estaban en los diversos penales.

Ejecutar ese tipo de hechos fue parte de las acciones delictivas que se dieron durante la tregua, según lo que testificó “Nalo”, testigo clave que la Fiscalía presentó en la vista pública.