Fieles católicos iniciaron ayer la peregrinación desde Catedral Metropolitana de San Salvador hacia Ciudad Barrios, en San Miguel, donde nació el beato Óscar Arnulfo Romero, como parte de las actividades preparadas en conmemoración por el centenario de su natalicio.

En medio de cantos, vivas y rezos, grupos de niños, jóvenes, religiosas, estudiantes, sacerdotes y extranjeros, se unieron para participar en la peregrinación que inició con una misa celebrada en la cripta de Catedral a las 5:00 a.m. por el arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar.

Los seguidores atravesaron el bulevar del Ejército que fue cerrado desde las 7:00 a.m., para permitir el paso de la peregrinación, situación que causó molestia en algunos transportistas y usuarios.

En el recorrido, el cardenal Gregorio Rosa Chávez aprovechaba cada oportunidad para enviar un mensaje de esperanza y motivación a los peregrinos.

“Vamos al encuentro con Jesucristo guiados por un profeta, el más grande en la historia de El Salvador, vamos felices, entusiasmados, esperanzados y dispuestos a ser parte de un cambio en un país que vence las tinieblas, la muerte, la violencia, la desesperanza, la indiferencia y decide unirse en paz, fraternidad, alegría y justicia”, dijo Rosa.

También hizo un llamado a los jóvenes, para que “se atrevan a cambiar la historia” y busquen un futuro diferente. Desde el inicio de la ruta los adultos mayores, predominaron en el recorrido; muchos dijeron ser testigos y seguidores de la obra de Romero, desde que estaba vivo, su lucha por el pueblo y amor por los demás. A pesar de su avanzada edad planificaron el viaje que exige recorrer 98 kilómetros a pie en tres días.

Tal es el caso de Marina Membreño, feligrés y amiga del beato, proveniente de Ciudad Barrios, quien a sus 81 años se inscribió en la peregrinación; orgullosa dijo esperar terminarlo en las mejores condiciones. “Vine porque lo quiero, aprendí mucho de él. Nos criamos juntos, monseñor nos dio el ejemplo de un gran ser humano, nos enseñó cómo amar y luchar para el pueblo, y a seguir los caminos del Señor”, dijo mientras se conducía junto a la imagen del beato que acompañará a la feligresía durante la peregrinación.

También, extranjeros que recién llegaron al país se unieron en la celebración, en comisiones especiales viajaron desde Guatemala, México, Alemania, Italia y Estados Unidos.

El cardenal Rosa Chávez anunció que el Papa Francisco está pendiente de la festividad y mañana llegará al país su enviado especial, que se reunirá el domingo en Ciudad Barrios, para participar de la eucaristía. También asistirán el presidente de la república Salvador Sánchez Cerén.

El padre Simeón Reyes explicó que era difícil calcular el número de asistentes porque muchos se incorporaban en el camino. Hasta el jueves, se habían vendido 1,500 kits y alrededor de 800 personas se habían inscrito para realizar el recorrido completo.

Para garantizar la seguridad de los asistentes, la Policía Nacional Civil desplegó un dispositivo que acompaña el recorrido durante los tres días, también la Cruz Roja Salvadoreña atendió emergencia por el calor, y el cansancio de la caminata, como calambres en las presonas mayores.

La peregrinación llegó a San Rafael Cedros a las 7:40 de la noche, ayer, ahí entregaron a la diocésis de San Vicente.