En la finca Martania, de Ciudad Delgado, fue descubierto un cementerio clandestino donde se ubicaron las osamentas de tres personas enterradas, según informó la Fiscalía General de la República.

El procedimiento a cargo de la oficina fiscal de Mejicanos junto a la Policía, comenzó a primeras, pero en horas del mediodía se informó sobre el hallazgo del primer cuerpo.

Las autoridades llegaron hasta ese lugar tras recibir información de un testigo criteriado, quien dijo que la Pandilla 18 revolucionaria había instalado en la referida finca un cementerio clandestino.

Cuando la Fiscalía y agentes de investigación hicieron la inspección verificaron que había partes de tierra hundidas lo cual llevó a pensar que había personas enterradas.

La información proporcionada por el criteriado finalmente fue verídica ya que cuando comenzaron a procesar la escena descubrieron tres fosas y en cada una estaba el cuerpo de un hombre.

El criteriado, quien decidió colaborar con la Fiscalía a cambio de un beneficio procesal, dijo que uno de los hombres fue asesinado y enterrado en el año 2013, mientras que los otros dos fueron ejecutados y sepultados en la misma finca en el año 2014.

El testigo proporcionó al Ministerio Público el nombre de cada de uno de los asesinados y sus respectivas características, manifestando la fecha exacta en la cual los asesinaron, esa información fue monitoreada en la base de datos de personas desaparecidas y se determinó que las fechas proporcionadas por el criteriado coinciden con los reportes de denuncia sobre desaparecidos.

La Fiscalía General de la República ha confirmado que las tres víctimas no pertenecían a ninguna pandilla, y si bien el criteriado ha manifestado la razón por la cual los asesinaron por el momento no se puede dar detalles al respecto, ni conocer los nombres de los tres hombres encontrados en las fosas ya que primero debe probarse científicamente que son las tres personas reportadas como desaparecidas en la zona, en tres fechas diferentes.

La Fiscalía, tras hacer las exhumaciones ordenará al Instituto de Medicina Legal realizar pruebas de ADN para verificar que se trata de las mismas personas cuyos parientes denunciaron su desaparición.

Una vez que confirme la identidad vía prueba de ADN, los restos será entregados a sus parientes quienes los estaban buscando desde los años 2013 y 2014, también la Fiscalía al tener los resultados podrá procesar por el delito de homicidio a los pandilleros que participaron en los hechos.

El criteriado ha informado a la Fiscalía sobre quienes participaron en los hechos, las víctimas supuestamente fueron privadas de libertad y luego de asesinarlos los enterraron para no dejar evidencia en la zona.