Tanto Nelson Rauda como Anilber Rodríguez gozan de medidas alternas a la detención durante el juicio que se celebra en su contra. / DEM


El exdirector del penal de Quezaltepeque, Miguel Ángel Hernández incriminó ayer, directamente, con actividades ilícitas durante la tregua al exdirector general de Centros Penales, Nelson Rauda y al exinspector de esa dependencia, Anilber Eduviges Rodríguez Villeda.

Confirmó además que hubo reuniones entre los mediadores de la tregua Raúl Mijango y Juan Roberto Castillo Díaz con pandilleros recluidos en el penal de Quezaltepeque y que al finalizar esos encuentros a los integrantes del barrio 18, revolucionarios, les hallaron teléfonos celulares y cigarros.
El exdirector del penal de Quezaltepeque, recibió una llamada de Nelson Rauda para notificarle que iba ser trasladado por ser desleal al proceso de la tregua”
Fiscal del caso

Hernández dijo que se violaron los protocolos de seguridad porque había instrucciones del inspector general de permitirles todas las facilidades e ingreso al recinto sin que fueran registrados.

Según Hernández, el haber registrado a los pandilleros y encontrarles los teléfonos le costó su puesto como director de ese penal, ya que Nelson Rauda lo llamó al despacho de la Dirección General de Centros Penales en San Salvador para reprocharle su actuar y lo tildó de “desleal” al proceso de la tregua.

El testigo fue nombrado como director del reclusorio de Quezaltepeque en julio del año 2011 y lo trasladaron al penal de Jucuapa, el 23 de marzo de 2012; ese traslado habría tenido efecto porque Raúl Mijango, cuando salió de visitar a los cabecillas que habían llevado desde “Zacatraz”, le advirtió que iba solicitar que lo cesaran como director.
El señalamiento que hace el exdirector de Quezaltepeque es sin base real, ¿por qué señalar algo y no poner una denuncia en la Fiscalía o en la Policía?”
Manuel Chacón
Defensor de Rauda

El testigo dijo al juez que cuando encontró los ilícitos a los pandilleros le informó al inspector general y le respondió “que así lo dejara”; la defensa en el contrainterrogatorio cuestionó al testigo el por qué no denunció ese hecho ante la Policía o Fiscalía, pero Hernández dijo que eso ya era del conocimiento de Rodríguez Villeda.

Ayer también declararon dos técnicos en informática, quienes manifestaron que por orden de la Inspectoría de Centros Penales, se retiraron computadoras del Centro de Monitoreo del penal de Izalco, pero no expresaron qué contenido tenían.

El exsubinspector general, Sergio Ventura dijo que supervisó reuniones en Mariona entre los mediadores y pandilleros presos y en libertad, afirmando que se violaron los protocolos y que no denunció esas irregularidades porque sus superiores estaban enterados.

7
testigos
En el segundo día de juicio declararon siete testigos de descargo que la Fiscalía presentó.