Ser embajador de un país ante otra nación es ejercer una representación la cual puede ser ante un organismo de prestigio internacional, generalmente se ubican en las sedes que están en la ciudad capital del país del país anfitrión, gozan de ciertos beneficios entre ellos la inmunidad diplomática, se puede ser embajador o embajadora de carrera, lo cual implica toda una formación especializada, preparación y mucho estudio, es decir son personas que además de su preparación y conocimiento interdisciplinario, idiomas, conocen de cultura, política, educación, economía, turismo, y el mundo de la etiqueta y protocolo.


En nuestro país es lamentable la falta de la práctica de valores y principios en nuestra sociedad y como el alcoholismo sigue causando daño, luto, dolor, enfermedad, cárcel, accidentes de tránsito y otros. Resulta que ahora las cervecerías conocidas en buen salvadoreño como “chupaderos” tienen una estrategia de estar ubicadas en zonas residenciales de clase media y alta, con las promociones de que todas las marcas de cerveza nacional o extranjera en promedio oscilan por $1.50 cada una, y no existen límites; los consumidores pueden permanecer en ebriedad y seguir consumiendo, si eres una persona “mal trago” te puedes ganar una golpiza por un equipo de matones “saca bolos” pero ahora el alcoholismo y el drama para la juventud salvadoreña esta delante de los ojos de toda la sociedad, sin esconderse, y es que puedes ser un “embajador” o “embajadora” de guaro, así como lo lee.


Estos nombramientos a tan alta distinción, tiene requisitos y estándares muy altos más, entre ellos por supuesto ser alcohólico o alcohólica, tienes que ser una chica o chico popular, que tengas miles de seguidores en tus redes sociales en especial instagram, licencia de conducir, una vida llena de contactos, disponible de miércoles a domingo, ser “buena onda”, debes de estar presente varias noches de todas las semanas para llevar más jóvenes principalmente para que se embriaguen y gasten el dinero en el chupadero. Entre más jóvenes con capacidad económica y de ingerir bebidas alcohólicas eres un mejor “embajador”


Las y los embajadores no tienen tan alta distinción solo por ser populares y ser “influencer” por supuesto que tienen beneficios económicos, entre más “chupen” y se embriaguen sus recomendados o referidos, más dinero para ellas y ellos; puedes redimir o canjear tu dinero por botellas de licor a la mesa donde está el embajador o embajadora y jactarse que chupan gratis. Estos nuevos embajadores en el país tienen que ser fieles a su antro, no pueden ir a tomar licor a otras cervecerías por que se arriesgan a que los destituyan de tan digno nombramiento.


En teoría todos y todas las consumidoras son mayores de edad, pero oscilan mayoritariamente entre los 18 y 25 años, toda una carrera alcohólica que sin dudas inicio en la adolescencia; estos jóvenes al salir en estado de ebriedad generan accidentes de tránsito, irrespeto y violación al reglamento general de tránsito, violencia intrafamiliar, y otros. Ya suficientes problemas tenemos en nuestro país, para que ahora sea un oficio, un trabajo, un estilo de vida llevar a otras y otros para que sigan o se hagan alcohólicos.


Mientras la tasa de salvadoreños y salvadoreñas que fallecen cada año por alcoholismo es de 18.5 por cada 100,000 habitantes siendo según la Organización Mundial de la Salud el nada honroso primer lugar. Nuestra juventud sigue siendo la más afectada por los homicidios, desapariciones, se suicidan y cada día son más los que se convierten en alcohólicos.