La sociedad del siglo XXI, se ha vuelto fría en las relaciones humanas, ya que los dispositivos móviles y el internet ha venido a sustituir el apretón de mano, los abrazos y el afecto, también se ha cruzado desde hace décadas el lindero de las relaciones colectivas a lo individual, puesto que se tiene como enfoque hacer dinero sin importar las personas que se lleven de encuentro, incluso el ser humano a pasado de ser un gestor dentro de una organización a representar un numero que genere rentabilidad, es decir que la codicia a sustituido la solidaridad y el amor al prójimo.

De modo que la ausencia de amor y solidaridad es lo que Dios, le recuerda a la nación de Israel, por medio del profeta Isaías en el capitulo 58. Ocho siglos antes de la venida del Señor Jesucristo. “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado. Que me buscan cada día, y quieren saber mis caminos, como gente que hubiese hecho justicia, y que no hubiese dejado la ley de su Dios; me piden justos juicios, y quieren acercarse a Dios”

¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste caso; humillamos nuestras almas, y no te diste por entendido? He aquí que en el día de vuestro ayuno buscáis vuestro propio gusto, y oprimís a todos vuestros trabajadores. He aquí que para contiendas y debates ayunáis y para herir con el puño inicuamente; no ayunéis como hoy, para que vuestra voz sea oída en lo alto……¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo?

¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano? Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia… Dios hace una dura reprensión porque la sociedad de aquel entonces estaba mas preocupada por satisfacer los deseos de la carne, dando rienda suelta a los instintos carnales, que preocuparse mas ayudar al prójimo.

De manera que prevalecía la vanagloria de la vida, es decir todo aquello que apela a la jactancia, arrogancia, orgullo o soberbia, propio de las personas que se dedican a la acumulación de poder y riquezas de forma obscena sin importarle las necesidades de los menos favorecidos, con ello no estoy diciendo que la Biblia censure la generación de riquezas de manera honesta, lo que la Biblia enseña, es que la codicia y el amor al dinero no es bueno, después de todo el dinero sin el propósito de hacer el bien y de ponerlo en función de aquellas personas que ahora no tienen un techo o alimento, solo es dinero sin propósito.

Tampoco estoy diciendo que hay que empobrecerse para enriquecer a los mas necesitados, lo que trato de explicar es que el dinero en el banco no tiene ningún valor, y a las desafortunados hay que enseñarles a ganarse la vida de forma honrada, extendiéndoles una oportunidad de crecimiento, y no se trata de ser millonarios para ayudar, se trata de tener sensibilidad ante la miseria y la necesidad, como el caso de Madre Teresa de Calcuta, no tenia riquezas, pero poseía lo mas importante amor al prójimo y sensibilidad ante los desafortunados.

Hay mucho que hacer a favor de El Salvador, dado que hay miles de familias que han perdido su fuente empleo, otros sus viviendas productos de las fuertes lluvias, miles de niños circulan por las calles, barrios y caseríos sin fe y sin esperanza, dado que están enredados en las drogas, de modo que es momento de unirnos y hacer a un lado las diferencias y dejar de ver a los salvadoreños como votantes, y llevarles alimentos y frazadas, sin tomarse fotos, ni videos, es decir abandonar toda postura farisaica.