Escobar Alas exhorta a gobiernos a hacer "acuerdos regionales" para defender a los migrantes

El arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar Alas, propuso este domingo la implementación de acuerdos regionales entre países para proteger los derechos de los migrantes, ante la creciente crisis migratoria que afecta a la región. Durante una conferencia de prensa, el líder religioso destacó la necesidad urgente de que los gobiernos actúen de manera conjunta para garantizar el respeto a los derechos humanos de los migrantes y refugiados, especialmente aquellos que salen del territorio salvadoreño hacia Estados Unidos. El arzobispo subrayó que la migración debe ser vista como un fenómeno que afecta a toda la región, y que es necesario adoptar políticas de cooperación que atiendan las razones del desplazamiento forzado y no debe ser vista como un acto delincuencial. "Se les señala como delincuentes, como personas que han cometido delitos porque no tienen documentos es injusto, serán indocumentados posiblemente pero no delincuentes y que se les trate como tal vulnerando todos sus derechos es muy grave”. . Además, Escobar Alas aseguró que la iglesia siempre estará a favor de los migrantes, defendiendo sus derechos, "porque la migración en principio es un derecho de toda persona” y que el gobierno debe priorizar las zonas que han estado sometidas por la violencia. "Hay que reflexionar mucho y ojalá se busque unas políticas convenientes y que también la economía del propio lugar mejore porque nuestra gente no quiere irse para otros países, todos estamos contentos de ser salvadoreños y de vivir aquí, si alguien se ve forzado a salir es porque no encuentra formas de salir adelante aquí, si se desarrollan los lugares de estas personas no migraron”, expresó. Y añadió: "Ojalá que la migración disminuya y que llegue un momento en que no tengamos que salir, pero para mientras cada migrante debe ser protegido por sus derechos y nosotros siempre vamos a estar velando por ellos”.

Deportaciones masivas

Donald Trump, quien asumirá la presidencia de Estados Unidos el 20 enero de 2025, piensa declarar estado de emergencia nacional y recurrir al ejército para llevar a cabo una deportación masiva de migrantes, fue una de las principales promesas de su campaña. El republicano calificó la entrada de migrantes sin visa por la frontera con México como una "invasión” y prometió que las futuras deportaciones serán "la mayor operación” de deportación en la historia de Estados Unidos. Además, dijo que quiere poner fin o limitar otras vías legales de entrada como un amparo migratorio que les otorga permiso de residencia y trabajo (Estatus de Protección Temporal, TPS) o la posibilidad de solicitar cita a través de una aplicación de teléfono móvil o mediante trámites en los países por los que pasan.