Militares no dejan salir ni entrar en San José El Pino

Martes 29, Marzo 2022 - 3:25 AM
Una militar revisa las bolsas de una mujer, en la entrada de la colonia San José El Pino, Santa Tecla. / Gabriel Aquino.

Los residentes solo pueden salir si tienen un comprobante de un empleo formal.

Al menos una decena de militares custodiaban la entrada de la colonia San José El Pino, en Santa Tecla, e impidieron ayer el paso a los transeúntes que intentaban salir o entrar de la colonia sin antes identificarse y mostrar qué llevaban en sus bolsas. En realidad no se podía salir, solo a aquellos que demuestraran con un documento que tenían un trabajo formal, de lo contrario debían regresar a sus casas. Tampoco se podía entrar sino vive en la zona. Esto aunque el derecho a la circulación no está limitado dentro del régimen de excepción.Ese fue el caso de Ramón, un salvadoreño que ayer llevó medicamentos a uno de sus familiares a esa colonia, pero no pudo entrar; otro pariente tuvo que salir por ellos. Con miedo y bajo la petición de no grabarlo, habló con los periodistas y relató el asedio de los pandilleros de la Mara Salvatrucha en el lugar.

"¿Por qué la policía no hacía nada?”.

La primer denuncia que hizo Ramón fue matizar una especie de contubernio entre agentes de la Policía Nacional Civil y los pandilleros: "Pusieron un punto de policías ¿por qué nunca hacían nada, si los mareros estaban aquí y ellos estaban allá donde está la escuela, ahí estaba el punto de la policía, ¡de años! ¡Años de estar el punto de policía! Y como que eran amigos pues”, se quejó el hombre abatido por no ver a su familiar. Asegura que todos los vecinos de la colonia tienen una señal para entrar sin problemas en sus carros: apagar las luces y bajar los vidrios, de lo contrario "te paran”, afirma. Hace dos meses cambió vehículo y llegó a la colonia, afirma que un pandillero llegó a tomarle fotos a su carro y se arrecostó en él, a manera de intimidarlo. "No sé qué quería ese chavo, pero me fui”, dice. Añade que hace 7 años, a su hijo no lo habían reconocido y lo acorralaron en un pasaje y lo tomaron del cuello. "¿Vos de dónde sos?”, lo cuestionaron, hasta que se identificó y lo reconocieron. "Ya se lo esperaban, porque si da miedo, ponerles el dedo a los muchachos”, concluye sobre el operativo.