El prelado murió por las complicaciones de Alzheimer, una enfermedad degenerativa que le fue diagnosticada en 2012, cinco años después de renunciar al arzobispado.
El arzobispo emérito de San Salvador, Fernando Sáenz Lacalle, falleció a las 5:50 de la mañana de este 28 de abril a los 89 años de edad, confirmó ayer la Iglesia Católica de El Salvador.
Sáenz Lacalle murió en su residencia en La Libertad, luego de 10 años de padecimiento de Alzheimer, una enfermedad degenerativa que limitó sus actividades pastorales, según informó el Arzobispado de San Salvador.
La Iglesia Católica salvadoreña dijo que los restos del prelado emérito, Fernando Sáenz Lacalle, serán velados a partir de este viernes en Catedral Metropolitana, desde las 9:00 de la mañana, en capilla ardiente.
La velación se mantendrá durante sábado y domingo en horario de 7:00 de la mañana a 6:00 de la tarde y su funeral será el próximo lunes, a las 10:00 de la mañana, y será sepultado en la cripta de catedral.
La última vez que se le vio públicamente fue el pasado 23 de enero del 2022, en la misa de beatificación del padre Rutilio Grande, donde se observó un caminar con dificultad.
Fotografía del 13 de mayo de 1995, día de la toma de posesión de Sáenz Lacalle como arzobispo de San Salvador. / Archivo DEM
Vida y obra.
Nació en Cintruénigo, provincia de Navarra, España el 16 de noviembre de 1932.Estudió Ciencias Químicas, en la Universidad de Zaragoza, de su país, pensando en hacerse cargo de la fábrica de jabones de su padre, pero conocer al sacerdote Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei, cambió el rumbo de la vida de Sáenz Lacalle.
En 1959, fue el mismo Escrivá quien le preguntó si quería ser sacerdote y el respondió "Con mucho gusto padre”, según relató a Diario El Mundo en 1995, a pocos días de asumir su cargo como arzobispo.
Se ordenó como sacerdote el 9 de agosto de 1959, en Madrid, bajo la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, de la Prelatura del Opus Dei. Llegó a El Salvador en 1962 donde inició su vida sacerdotal, tres años más tarde obtuvo la nacionalidad salvadoreña.
Ordenación Episcoal de monseñor Sáenz en Roma, con el papa Juan Pablo II. / A DEM
El 22 de abril de 1984, el papa Juan Pablo II lo nombró obispo auxiliar de Santa Ana, y fue nombreado en la jerarquía de la iglesia católica en El Salvador en abril de 1995, tras el fallecimiento del arzobispo Arturo Rivera y Damas.
Asumió el cargo el 13 de mayo de 1995 en medio de relaciones rotas entre el Gobierno y la Iglesia; dio un enfoque espiritual, devenido de su formación Opus Dei.
Previamente, el 3 de julio de 1993 fue designado administrador apostólico del Ordinariato Militar donde ascendió al cargo de general de brigada de la Fuerza Armada de El Salvador, en 1997.
Foto de graduación como licenciado en Ciencias Químicas. / Archivo DEM
Bajo su paso por la iglesia católica salvadoreña está el recibimiento al papa Juan Pablo II, en su segunda visita al país, en 1996 e inaugurar la Catedral Metropolitana el 19 de marzo de 1999.
Al cumplir 75 años de vida, el 16 de noviembre de 2007 presentó su renuncia al cargo de arzobispo de San Salvador, en cumplimiento al Código de Derecho Canónico. Monseñor Fernando Sáenz Lacalle también era doctor en Teología, graduado de la Pontificia Universidad Lateranense de Roma y mientras fue obispo auxiliar en Santa Ana fue vicerrector de la Universidad Católica de Occidente, de donde también fue docente.
Al asumir su cargo de arzobispo recordó su amistad con monseñor Óscar Arnulfo Romero a quien conoció personalmente.
Monseñor Sáenz en una procesión de Domingo de Ramos en 2005. / Archivo DEM