Una foto por aquí, una selfie por allá... Con toda la paciencia del mundo, Mágico González se prestó a cada una de las solicitudes durante su presencia en la conferencia de prensa donde se dieron detalles del homenaje que el crack salvadoreño recibirá en la reinauguración del estadio que lleva su nombre. Esto incluye estatua, busto, museo, documental y partido internacional.

Vestido con una camisa rosada con la que confesó sentirse “raro e incómodo”, afrontó a las cámaras y micrófonos con sus frases que ya son éxito mundial, tales como “positivitez”, “sigamos manteniendo el buen rollo” o “procuro ser feliz sin pisotear a nadie”.

Ante la duda si se atreverá a jugar algunos minutos en el juego entre la Selecta y Cádiz del 30 de mayo, Jorge respondió fiel a su estilo: “Vamos a ver cómo anda la vejez en esos días”. Eso sí, se mostró muy agradecido con todo lo que le están haciendo. “Son cosas de Dios, divinidades que uno tiene que saber darles su sitio”, agregó.

Mágico afirmó que su misión es “transmitir eso de ser salvadoreño” y redefinió su concepto de felicidad: “Uno es así, estas cosas son como una filosofía de vida, ¿no? Algo así como ‘no es más rico el que más tiene, sino que el que menos necesite’. Cosas que aparentemente son tonterías, pero es mi manera de ser”.

No se cansó de reconocer todo lo que están haciendo para homenajearlo. “Agradezco, porque los homenajes hay que hacerlos en vida. Como dice el dicho: ‘En vida, hermano, en vida’. Y no es que me sienta muerto, pero me siento muy, pero muy agradecido con las cositas de Dios y con el pueblo, claro, y con quienes lo están haciendo posible. Es una sensación bien linda, bien bonita... ”, finalizó.