Con este doblete, el segundo que logra de forma consecutiva, Messi acumula nueve tantos en siete partidos disputados en este arranque de temporada, uno por delante del colombiano Cristian Arango (Real Salt Lake) y del belga Christian Benteke (DC United). El Inter se mantiene en el liderato de la Conferencia Este con 21 puntos en 11 partidos mientras el Revolution seguirá en el último lugar con cuatro unidades en nueve juegos.
El partido arrancó con un temprano gol de otro atacante argentino, Tomás Chancalay, que avanzó a los locales con sólo 37 segundos de juego. Messi le dio la vuelta con dianas en los minutos 32 y 68 ante el júbilo en el Gillette Stadium de Foxborough (Massachusetts), la casa de los New England Patriots de la NFL, donde se trasladó el juego ante la enorme demanda de aficionados que no querían perderse la visita del ocho veces ganador del Balón de Oro.
Esta cancha, de césped artificial, fue la segunda de la liga de football americano (NFL) que se llenó este mes para recibir al Inter Miami, tras el estadio Arrowhead de los Kansas City Chiefs, donde se congregaron 72.610 espectadores.
El argentino-estadounidense Benjamin Cremaschi convirtió el tercer gol del equipo que dirige Gerardo Martino en el minuto 83. El uruguayo Luis Suárez, que había entrado de relevo en el 63, completó la goleada con un brillante remate en el 89 tras asistencia de Messi.
En la segunda mitad, el 'Tata' Martino hizo debutar el mediocampista internacional paraguayo Matías Rojas, aterrizado esta misma semana en un Inter acuciado por bajas como la de su compatriota Diego Gómez, el español Jordi Alba y el argentino Federico Redondo.
Remontada de Miami
Como ya es tradicional en sus visitas a otras canchas de la MLS, Lionel Messi fue recibido con ovaciones de los aficionados desde el mismo calentamiento.
Antes de que el argentino compensara los altos precios de las entradas, el Inter Miami le puso en bandeja un gol a los locales en una pérdida de balón del central argentino Nico Freire que derivó en un pase en largo a Chancalay, que aprovechó una mala salida del arquero Drake Callender para picarle el balón por arriba. Fue el tercer partido consecutivo en que el equipo de Martino concedió un gol en los primeros minutos de juego.
El Inter no perdió la compostura y comenzó a alimentar de balones a Messi, que dio un primer aviso en el 29 con un disparo desde fuera del área a las manos del arquero Henrich Ravas. Tres minutos después, el argentino no perdonó al recibir una asistencia del finlandés Robert Taylor que lo dejó en un mano a mano con el eslovaco Ravas.
En la segunda mitad, el Inter mantuvo el control del juego hasta que Messi colocó el 2-1 al recibir otro gran pase filtrado de Busquets que le permitió definir con un zurdazo cruzado.
Ante un rival sin capacidad de respuesta, el joven Cremaschi aumentó la ventaja al aprovechar el rechace del arquero a un disparo de Messi, que había recibido un centro desde la izquierda de Matías Rojas.
Suárez se unió a la fiesta en la recta final con un trallazo a la escuadra tras recibir un pase de Messi.