El Nápoles se clasificó este miércoles a los cuartos de final de la Copa Italia tras superar al Cagliari en una agónica tanda de penaltis (1-1 en el tiempo reglamentario, 9-8 desde los once pasos), en un partido disputado en el Estadio Diego Armando Maradona que pareció complicarse más de la cuenta para los locales.

Los partenopeos rompieron así una racha de cuatro temporadas consecutivas quedando eliminados en octavos. En los últimos años, la maldición los dejó fuera ante Lazio (3-1), Frosinone (0-4), Cremonese (por penales) y Fiorentina (5-2). Esta vez, aunque sufrieron, lograron avanzar por primera vez desde la edición 2020-2021.

El encuentro parecía encaminarse sin sobresaltos cuando Lorenzo Lucca abrió el marcador al minuto 28 con un certero cabezazo tras un centro de Antonio Vergara, reflejando el dominio que hasta entonces ejercía el conjunto dirigido por Antonio Conte.

Sin embargo, el Cagliari —que lucha por no descender en la Serie A— resistió con orden y paciencia, y encontró el empate en su única llegada clara al arco. En el minuto 67, una jugada rota terminó en los pies de Sebastiano Esposito, quien no perdonó ante un Milinkovic-Savic vencido.

Conte intentó reaccionar con los ingresos de jugadores como Lang, Hojlund y Neres, pero ninguno logró marcar diferencia en los minutos finales. Así, el boleto a cuartos tuvo que definirse desde el punto penal.

La tanda fue una verdadera batalla psicológica. El arquero Milinkovic-Savic, además de atajar el último disparo, convirtió su penal en la séptima ronda. Neres había tenido la oportunidad de sentenciar antes, tras el fallo de Felici, pero Caprile detuvo su tiro.

Finalmente, con la serie igualada 8-8, Luvumbo falló su intento y dejó el pase servido para Nápoles. El central Buongiorno no desaprovechó y selló el triunfo desde los once pasos.

El conjunto napolitano enfrentará en cuartos al ganador del duelo entre la Fiorentina y el Como, dirigido por Cesc Fàbregas.