El Real Madrid conquistó una victoria convincente en su visita al Athletic Club al derrotarlo 0-3 este miércoles en San Mamés. El equipo de Xabi Alonso rompió así su cadena de tres igualdades consecutivas y frenó el impulso de los locales, que buscaban enlazar un segundo triunfo.

La primera anotación llegó al minuto siete, cuando Kylian Mbappé finalizó una brillante acción individual. Antes del descanso, en el 42, Eduardo Camavinga aumentó la ventaja merengue con un cabezazo libre de marca, luego de un servicio también de cabeza del atacante francés.

Mbappé selló el marcador al 59 con un potente remate desde larga distancia que superó a Unai Simón y confirmó la superioridad madridista en territorio bilbaíno.

La buena sintonía entre Mbappé y Vinícius era un problema para la defensa del equipo vasco, que sufría mucho corriendo para atrás con sus centrales fuera de zona, denotando una preocupante falta de intensidad defensiva. Sin embargo, Courtois tuvo que salvar en dos ocasiones a su equipo con dos grandes de valor gol a Guruzeta y Álex Berenguer. Pero el Real Madrid respondió con un remate al palo de ‘Vini’ tras regatear a Simón.

Ernesto Valverde introdujo a Jesús Areso y Unai Gómez en el descanso y su equipo amenazó la portería de Courtois con un disparo lejano y potente de Mikel Jauregizar al que respondió con una buena mano el meta belga. Al Real Madrid, que vio cómo Trent tenía que abandonar lesionado el campo -sustituido por Raúl Asencio-, le costó entender al ‘nuevo’ Athletic y tuvo que hacer algún ajuste defensivo, aunque no sufrió demasiado.

Y, tras algo de tensión por un encontronazo con Adama Boiro, Mbappé puso el 0-3 con un disparo lejano desde la izquierda, gracias al espacio y tiempo que la defensa local le dio al francés. Un jarro de agua fría para el Athletic, noqueado y con la sensación de no saber cómo meter mano al Real Madrid. Después del bajón de intensidad, Alonso dio descanso a Mbappé, Militao y Vinícius, y cambió al lesionado Camavinga por Güler. Solo Mikel Vesga y Fede Valverde pudieron mover el marcador sin éxito.