La coalición llamaba a actuar para atacar las prácticas "injustificadas e irrazonables" de Pekín y entidades chinas con esta sustancia más potente que la heroína.
Estima que las exportaciones ilegales de fentanilo de la segunda economía mundial "han devastado y siguen devastando las comunidades, los ciudadanos y el comercio estadounidense".
Estados Unidos acusa a Pekín de hacer la vista gorda ante el mortífero comercio de fentanilo, que provoca decenas de millas de muertes anuales por sobredosis en su territorio.
La retirada de la petición se produce días después de que el presidente electo Donald Trump prometiera imponer aranceles adicionales a las importaciones procedentes de China por su supuesto papel en la epidemia de opioides, y semanas antes de que el magnate vuelva a la Casa Blanca.
Trump también ha amenazado con imponer aranceles del 25 % a las importaciones de México y Canadá hasta que ambos países ayuden a detener el flujo de fentanilo y la inmigración ilegal.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, llevó la contraria al magnate, quien considera que las autoridades mexicanas pueden hacer mucho más para impedir que los cárteles de la droga fabricada fentanilo con sustancias procedentes de China.
Sheinbaum atribuye la "epidemia" de fentanilo en Estados Unidos a "un problema de consumo y de salud pública".
Nazak Nikakhtar, socio del bufete de abogados Wiley Rein que representa a las familias afectadas en la petición, declaró anteriormente a la AFP que el gobierno chino consiente el comercio de fentanilo.
Pese a haber retirado la petición, la coalición podría volver a presentarla más adelante.
La representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, afirmó en un comunicado que aplaudía el liderazgo del grupo "al llamar la atención y subrayar la urgencia" de la crisis del fentanilo.
El ministerio de Relaciones Exteriores chino dice estar "dispuesto a continuar la cooperación antinarcóticos con Estados Unidos".