La Fiscalía General de la República acusó este miércoles ante el Juzgado Primero de Paz, de San Salvador, a cinco personas implicadas en la tragedia del Cuscatlán, acusadas de los delitos de homicidio culposo, lesiones culposas y estragos con agravación.

La acusación es en perjuicio de nueve víctimas y 51 lesionados, según estableció la investigación de la Fiscalía.

Los cinco acusados son el presidente del Alianza FC, Pedro Hernández; el gerente de seguridad del Alianza, Edwin Abarca Ventura; la gerente financiera del Alianza, Zoila Córdova; el gerente general de EDESSA, Reynaldo Avelar Contreras, y el encargado de las llaves del estadio, Samuel García Montano, quienes fueron detenidos hace una semana.

Los acusados no fueron trasladados al Centro Judicial Isidro Menéndez, donde los fiscales les acusaron y serán notificados de los delitos en las bartolinas de El Penalito, donde guardan arresto. Los fiscales del caso no atendieron preguntas de la prensa.

“A ellos se les atribuye estos delitos por haber sido negligentes y a haber cometido omisiones dentro de las obligaciones que tenían para organizar este tipo de eventos y obviamente ha sido una situación que ha traído mucha tristeza al país y en ese sentido la Fiscalía ha sido garante y ha investigado los nueves fallecidos y las decenas de lesionados que tenemos”, afirmó la fiscal del caso, a través de un video colgado en la cuenta de Twitter de la Fiscalía.

El juzgado programó la audiencia inicial para el próximo viernes 2 de junio, a las 9:30 de la mañana.

La tragedia.

El pasado sábado 20 de mayo, el Gobierno afirmó que una docena de aficionados del Alianza F.C. murió en una estampida humana, cuando intentaban ingresar en el portón de sol general del estadio Cuscatlán, en San Salvador, ya sobre el tiempo de iniciado el partido de cuartos de final que disputaba el Alianza F.C. contra el C.D. FAS. Decenas de personas resultaron heridas y trasladadas a diferentes centros hospitalarios, con afectaciones de asfixia y traumatismos.