El Desde la madrugada de este lunes, el Gobierno salvadoreño desplegó a 2,000 soldados y 500 policías en la colonia 10 de Octubre de San Marcos, luego de haber detectado un grupo de pandilleros en el lugar, anunció el presidente Nayib Bukele.

"Inteligencia policial ha determinado que en la colonia 10 de Octubre, en San Marcos, San Salvador Sur, se encuentra un grupo de pandilleros escondidos", escribió Bukele en su cuenta de X, este lunes.

Según el mandatario, con este despliegue buscan "extraer hasta el último pandillero que se encuentre en el área".

Bukele acompañó su publicación con un video de la formación de los militares y policías en el cuartel El Zapote, en San Salvador, y posteriormente el despliegue de las fuerzas de seguridad en las calles. El ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, sostuvo que seguirán con las capturas de los remanentes de "terroristas".

"Vamos a seguir capturando a estos remanentes terroristas, con contundencia vamos a demostrarles que en este país el control del territorio le pertenece al Estado y a los salvadoreños de bien", escribió en X.

"Estamos estableciendo un cerco militar junto con la Policía Nacional Civil, la metodología es sabida, cercamos el lugar, y luego junto con la policía se extrae del sitio cercado aquellos delincuentes, de los cuales ya tenemos los archivos, los perfiles de ellos, que son los que se pueden encontrar en estos sectores", anunció el ministro de la Defensa Nacional, René Merino, en una transmisión del canal Estatal.

Merino añadió que tienen indicios que los pandilleros se quieren establecer en la colonia 10 de Octubre de San Marcos.

Cerco de seguridad en San Marcos.
Cerco de seguridad en San Marcos.

Otros cercos

El último cerco instalado fue el 25 de mayo de este año en cinco comunidades Tikal 1,2 y 3, Valle de Sol, y La Chintuc de Apopa, San Salvador, después de “varias denuncias” ciudadanas sobre la presencia de pandilleros.

En marzo de este año también Bukele anunció la instalación de un cerco militar en San José Cancasque, San Antonio Los Ranchos, Potonico y San Isidro Labrador, del departamento de Chalatenango, con el fin de desarticular una clica de la pandilla 18 Sureños vinculada a dos homicidios.

Previo a ello, el 11 de octubre del año 2023 el gobierno instaló otro cerco seguridad de 3,500 militares y 500 policías en las colonias Popotlán y Valle Verde de Apopa, debido a una supuesta reagrupación de las pandillas MS-13 y Barrio 18.

El 1 de agosto del 2023, también fue instalado un cerco de seguridad en Cabañas, luego de un ataque a policías en Ilobasco, ahí fueron desplegados 7,000 soldados y 1,000 policías. Este fue el quinto cerco instalador por el gobierno.

En mayo de 2023 también desplegaron a 5,500 militares y policías en Nueva Concepción, Chalatenango, tras el asesinato de un policía en manos de supuestos pandilleros.

El pasado 23 de noviembre de 2022, el mandatario salvadoreño lanzó la quinta fase de su plan de seguridad, denominado Control Territorial. Esta fase fue nombrada “extracción” y según Bukele consistiría en implementar cercos de seguridad como receta para sacar a los pandilleros de las comunidades, especialmente, en ciudades grandes.

El primer cerco implementado fue en Comasagua, de donde según Bukele, “aprendieron” para evitar que los pandilleros huyan.

Diez días más tarde, el mismo presidente anunció el otro cerco en el municipio considerado como el más inseguro del país: Soyapango, al oriente de la capital salvadoreña, con un despliegue de 8,500 efectivos de la Fuerza Armada y 1,500 policías.

La madrugada del 24 de diciembre, el Gobierno también cercó la comunidad Tutunichapa, en San Salvador, famosa por el narcomenudeo con 1,000 soldados y 130 agentes policiales.

Horas más tarde, ese mismo día, el Gobierno anunció que extendía el cerco a la comunidad La Granjita, siempre en la capital salvadoreña con 1,000 soldados y 100 policías.