La transición del fenómeno de El Niño aún no se ha completado y se prevé que en junio este pase a la fase neutral, según la última discusión diagnóstica del Centro de Predicciones Climáticas de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés).

“En resumen, una transición de El Niño a ENSO-neutral es probable en el próximo mes. La Niña pudiera desarrollarse en junio-agosto 2024 (49% de probabilidad) o julio-septiembre (69% de probabilidad)”, dice el pronóstico.

Para esta semana, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales prevé que la temporada invernal comience a instalarse en todo el país, inicialmente, se instalará inicialmente en la zona norte del país, en Chalatenango, Cabañas, la zona norte de San Miguel, Morazán y La Unión, serán los primeros en recibir el invierno a plenitud entre el 15 y el 20 de mayo.

En una segunda etapa, el invierno se terminará de instalar en la franja central entre el 20 y 25 de mayo, y entre el 25 y 31 de mayo será en la parte sur occidental, finalizando en la zona oriental posteriormente.


La región ha estado bajo la influencia del fenómeno de El Niño desde junio de 2023, cuando se confirmó el aumento de las temperaturas en el Océano Pacífico, y aunque se creía que este fenómeno se mantendría todo el año 2024, a finales del año pasado, la previsión cambió anticipando la llegada de La Niña.

La Niña se instalará a partir de junio de este año, pero sus efectos empezarán a sentirse en la segunda parte del invierno, probablemente a partir de agosto, lo anterior debido a que en julio se espera el desarrollo de una canícula.

El fenómeno de El Niño implica una reducción en las lluvias y puede causar sequías, mientras que La Niña es abundancia de lluvias, pero su aparición está asociada con inundaciones y tragedias del invierno.