El Consejo Coordinador Nacional Indígena Salvadoreño (CCNIS) exigió ayer que se actualice el registro de las poblaciones en El Salvador, ante esto, exigen al Estado aplicar el Plan de Acción Nacional de Pueblos Indígenas de El Salvador (PLANPIES).

En ese sentido, pidieron “dar seguimiento coordinadamente con las instituciones encargadas de la realización de la siguiente ronda del Censo Nacional, para establecer un instrumento que refleje datos desagregados sobre pueblos indígenas”, en el país.

Actualmente, la Oficina Nacional de Estadísticas y Censos del Banco Central de Reserva (BCR) realiza levantamiento de datos para el próximo censo de población; el último registro data de 2007, donde 13,310 personas de las más de 5.7 millones de habitantes, se identificaron como parte de un grupo étnico. De ellas, el 15% confirmó pertenecer al grupo lenca, 31 % como kakawira, el 27 % como pipil y el 27 % como “otro”.

Solo el censo municipal de Cacaopera, realizado junto a la extinta Dirección General de Estadística y Censos (Digestyc), CCNIS y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), data que en el 2018 se estimó que la población indígena, de esa localidad, fera 82.4 %.

Participación

Asimismo instaron a las autoridades a crear mecanismos de coordinación, para establecer consultas y participación para la adopción de leyes en relación a la propuesta de ley de derechos de pueblos indígenas de El Salvador y la participación de la juventud indígena en las instituciones referentes a esta población sociocultural.



La representante de CCNIS y mujer indígena, Juliana Ama, enfatizó en la exigencia relacionada a la adopción de la recomendación general N˚39 en derechos humanos, de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que pretende proteger los derechos de las niñas, jóvenes y mujeres indígenas.

Con lo último también exigen que se impulsen programas y proyectos culturales adecuados para fortalecer la identidad cultural de los pueblos indígenas, ya que en el pasado las mujeres indígenas fueron obligadas por las fuerzas de represión del Estado a dejar de utilizar sus ropas tradicionales y no hablar su idioma. Esto connotó en la pérdida de la identidad indígena.

Los pueblos indígenas no se reconocieron constitucionalmente hasta 2014, por impulso del CCNIS. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, mejor conocida como UNESCO, estima 200 personas nahuhablantes en el país.