El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales contabilizó 210 temblores en la ciudad de Conchagua y sitios aledaños desde el pasado 5 de marzo hasta las 11:00 de la mañana, de este 12 de marzo, informó la institución a través de sus redes sociales.

De estos, seis han sido sensibles por la población con magnitudes entre los 2.5 y 3.5 en la escala de Richter, asegura el séptimo informe de meteorología difundido la mañana de este martes.

Del total, 58 han sido localizados, cuyas magnitudes van desde los 1.8 hasta los 3.5 siempre en la escala de Richter; el sismo más sensible ocurrió el 7 de marzo, a las 4:16 de la madrugada con una profundidad de 5 kilómetros y una intensidad de III-IV en escala Modificada de Mercalli.

“Por las características de las señales registradas, el origen de esta actividad sísmica es atribuido a la activación de fallas geológicas locales. Cabe mencionar que, de acuerdo al historial sísmico en esta zona, no se descarta la probabilidad de que ocurran sismos de mayor magnitud a las observadas hasta este momento”, indica el séptimo informe.

Ayer en la tarde, el Ministerio de Medio Ambiente informó sobre un sismo de 3.9 que sacudió en el oriente del país, frente a las costas de Usulután.

La ciudad de Conchagua está localizada en las faldas de un volcán que lleva el mismo nombre, frente al Golfo de Fonseca, en el departamento de La Unión. Este coloso es uno de los menos activos en el país, y se considera extinto.

La última actividad sísmica que había reportado el Observatorio Ambiental ocurrió entre los últimos días de enero y los primeros de febrero, pero en el municipio de Juayúa, en el departamento de Sonsonate, que finalizó con más de 215 temblores con magnitudes que oscilaron magnitudes entre los 2.5 y los 3.9 en la escala de Richter.