“Aproximadamente 200 especies de vegetales que fueron ensayados (estudiados) de estas puedo compartir que un 30 % de ellas tienen actividad antiparasitaria contra el chagas”, declaró ayer el coordinador del laboratorio de Investigación en Productos Naturales de la Facultad de Química y Farmacia, Marvin Nuñez.
El mal de chagas es una enfermedad infecciosa transmitida por la picada de la chinche, que se expone al contacto de la materia fecal del insecto con la piel humana. El coordinador Núñez explicó que dicha enfermedad avanza silenciosamente y si no se trata puede generar problemas cardíacos.
Ante ello, señaló que actualmente existen dos medicamentos para tratar dicha enfermedad, Nifurtimox y Benznidazol, no obstante estas investigaciones buscan reducir el uso de fármacos que ocasionan efectos secundarios que repercuten en la salud.
“Con esto se buscan moléculas en las plantas que tengan mayor potencia que el fármaco elaborado y que (el paciente) tenga menos efectos secundarios”, indicó Nuñez.
El especialista expuso que en los 200 tipos de vegetación se identificaron diferentes grados de actividad antiparasitaria, unas muy activas y otras tienen una moderada actividad.
“Hemos descubierto alrededor de 25 moléculas bastantes activas, tenemos plantas salvadoreñas que son sumamente activas contra el parásito. Nos hemos dado cuenta que El Salvador puede ser un país pequeño, pero hay una gran cantidad de flora”, detalló Nuñez.
Flora salvadoreña.
El coordinador de la Facultad de Química y Farmacia explicó que las plantas tienen un arsenal químico para defenderse del ecosistema donde vive, que es donde comúnmente, habita dicho insecto parasitario, es por ello que se ha aprovechado extraer de las plantas esas sustancias y con ello tratar de combatir enfermedades.Algunas plantas que contienen sustancias antiparasitarias pertenecen a la familia de las anonas, otras son la planta pipers, salix, así como el gremio de los girasoles.
La investigación continúa en desarrollo a través del Centro de Investigación y Desarrollo en Salud (Censalud) y la Facultad de Química y Farmacia de la UES, como parte del “Proyecto de Investigación y Desarrollo Integral para el Control de la Enfermedad de Chagas”, en conjunto entidades gubernamentales como el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación.
Asimismo, participa la Agencia Internacional de Cooperación de Japón, (Jica), la Universidad José Matías Delgado y siete universidades de Japón, entre ellas la Universidad de Gunma, Universidad de la Ciudad de Osaka y Universidad de Keio, además del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas.
Por su parte, el vicerrector de la UES, Juan Rosa Quintanilla, destacó que han tratado de identificar aspectos para el control de la enfermedad a fin de ayudar a la población más afectada que son comúnmente de zonas rurales. Se trató de consultar con el viceministro de Salud, Carlos Alvarenga, sobre la situación del mal de chagas en El Salvador, sin embargo no hubo respuesta.