El expresidente de la República, Mauricio Funes. Archivo DEM


En el Juzgado 4o. de Instrucción de San Salvador, el Grupo contra la Impunidad, de la Fiscalía General de la República, presentó el dictamen de acusación (investigación final), del caso conocido como “Corruptela” que involucra a 30 personas, entre ellos al expresidente de la República, Mauricio Funes; al exfiscal general, Luis Martínez, los empresarios Enrique Rais y Aldo Vinicio Parducci Meléndez.

Una fiscal del grupo acusador dijo que se ha pedido que los 30 imputados sean enviados a juicio por los delitos de peculado, cohecho activo, cohecho propio, negociaciones ilícitas, omisión de investigación, lavado de dinero, falsedad ideológica y falsedad documental agravada.

En este proceso se investigaron 22 casos relacionados a delitos de corrupción, lavado de dinero y la fe pública, en los que se detectó un movimiento de $1 millón 700 mil producto de una serie de dádivas otorgadas y recibidas a cambio de beneficios personales.

En las indagaciones que el Ministerio Público ha incorporado al expediente se detalla que en el interior de la Fiscalía se creó una red dirigida por el entonces titular de esa institución Luis Martínez y otros jefes fiscales que recibían dádivas de funcionarios, exfuncionarios y empresarios, que tenían intereses en expedientes que se estaban investigando.

Según la fiscal, en el caso de Mauricio Funes, las indagaciones revelan el trato directo que tuvo con Luis Martínez. “Se logró determinar que entregó dádivas al exfiscal para que se le beneficiara en la investigación de El Chaparral”, sostuvo la representante del Ministerio Público.