El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, aseguró que los pastores tienen razón al decir que “Dios puede redimir a cualquiera” pero que “en la Tierra aún deben enfrentar las consecuencias de sus acciones”.

El mandatario salvadoreño respondió que es cierto que “Dios puede perdonar sus pecados y salvarlos” pero aclaró que deben pagar las consecuencias, ante una publicación de Los Angeles Times el 19 de abril sobre programas de rehabilitación para expandilleros.

"Todos en el curso fueron arrestados en la represión. También lo estaban docenas de padres con hijos en el programa extracurricular de la iglesia”, indica Los Ángeles Times en Twitter con la imagen de un pandillero de 29 años que formaba parte de un programa de rehabilitación después de pasar nueve años en un centro de detención juvenil.


El cardenal católico Gregorio Rosa Chávez criticó, en un medio español, la ausencia de la rehabilitación en el programa de seguridad del Gobierno de El Salvador. “En la propuesta del gobierno no hay ningún componente de rehabilitación. El pandillero ha sido demonizado de tal manera que está destinado a morir en la cárcel”, dijo en entrevista a Alfa y Omega.

En la publicación de Los Ángeles Times, se cuenta que un pastor trabajó con otros pastores para establecer casas de ayuda. “Varios pastores entrevistados dijeron que nadie en sus programas de rehabilitación había sido liberado después de los arrestos”; de 59 personas señalan que 41 en prisión de un programa respaldado por la Agencia para el Desarrollo de los Estados Unidos (USAID), indica el medio.

Por ahora, el artículo 27 de la Constitución salvadoreña, que prohíbe la pena de muerte, penas perpetuas y toda especie de tormento, obliga al Estado a organizar los centros penitenciarios “con el objeto de corregir a los delincuentes, educarlos y formarles hábitos de trabajo, procurando su readaptación y la prevención de los delitos”.

El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, ha asegurado que los pandilleros que vayan al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), ubicado en Tecoluca, “nunca” volverán a las comunidades, y también que ha dicho que todos los capturados en el régimen de excepción "nunca volverán a poner un pie" en las comunidades.

“Los terroristas que vayan al Cecot no van a volver nunca a nuestras comunidades”, expresó el 15 de febrero de 2023. Villatoro ha dicho que el Cecot recluirá al 60 % de los detenidos en el régimen de excepción, es decir, unas 40,200 personas, pero también ha dicho que el Cecot solo recluirá miembros de pandillas y no colaboradores de las mismas.

Las imágenes publicadas por el gobierno de los traslados a la llamada “megacárcel de Tecoluca” contienen únicamente pandilleros con grandes tatuajes de MS13 y 18.