El subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración Departamento de Seguridad Nacional, Blas Nuñez-Neto, informó el martes que han conversado con todos los países para que reciban más vueltos con personas repatriadas a raíz de la política de cierre de fronteras y prohibición de asilo implementada por Biden.
Estados Unidos empezó el cierre de la frontera sur y la prohibición de asilos a personas que hayan cruzado la frontera de manera ilegal desde la noche del martes.
Las autoridades migratorias mantendrán las medidas de restricción de paso fronterizo y gestión de asilo hasta que los encuentros de migrantes bajen a 1,500 diarios por siete días consecutivos; la medida se reactivará "si los flujos después de disminuir suben y superan a los 2,500 al día", de acuerdo a las explicaciones de Nuñez-Neto en la conferencia de prensa virtual.
Las solicitudes de entradas legales por cita, los niños no acompañados, las víctimas de tráfico de personas y casos como emergencia médica o amenaza a la vida o a la seguridad son excepciones de las restricciones anunciadas.
Durante los primeros cuatro meses del año 2024 Estados Unidos ha detenido a un total de 992,639 migrantes de todas las nacionalidades, de los cuales 735,187 han sido retenidos en su frontera sur, es decir, 6,706 diarios. La meta del gobierno estadounidense es llegar a menos de 1,500. Un total de 15,891 salvadoreños han sido retenidos en la frontera sur estadounidense durante los primeros 121 días de 2024, un total de 131 cada día.
Las medidas que se anunciaron hoy son más fuertes que las medidas que se han tomado anteriormente. Los cambios en cómo vamos a procesar a las personas van a resultar en la expulsión inmediata de la gran mayoría de las personas que se encuentran en la frontera.
Blas Nuñez-Neto,
subsecretario de Política Fronteriza de EE.UU.
Ante la posibilidad de impugnación contra la medida, el subsecretario Núñez-Nieto manifestó que "estamos listos para pelear esos juicios”.
La Casa Blanca anunció el 4 de junio la prohibición de la entrada y el asilo para los migrantes que crucen ilegalmente la frontera sur, lo que permitirá a los funcionarios de inmigración “la rápida expulsión de las personas que no tengan un fundamento legal para permanecer en Estados Unidos”, de acuerdo a una norma provisional de los departamentos de Justicia y Seguridad Interior de EE.UU.
Biden lanzó esta medida en plena campaña electoral en la cual la problemática migratoria podría ser decisiva en una contienda en donde Trump ha culpado a los migrantes de la violencia interna y Biden culpa a los republicanos por bloquear iniciativas para el refuerzo presupuestario que le permitiría enfrentar la situación.