El presidente de la República, Nayib Bukele, asumirá este sábado 1 de junio, las riendas del Poder Ejecutivo para el quinquenio 2024-2029 luego de tomar protesta constitucional en una sesión solemne convocada por la Asamblea Legislativa a las 7:00 de la mañana.

A la ceremonia de investidura presidencial, que se realizará en el Centro Histórico de San Salvador, asisten los integrantes de los tres poderes del Estado, integrantes de instituciones de control, magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), empresarios, representantes de gremiales y líderes internacionales como el Rey Felipe VI de España, el presidente de Argentina, Javier Milei; el secretario de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, Alejandro Mayorkas; el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, y personajes como el hijo de Donald Trump. El Legislativo aprobó este 1 de junio como asueto remunerado en el sector privado.

Bukele fue reelecto en el cargo en las elecciones del pasado 4 de febrero junto al vicepresidente Félix Ulloa bajo la bandera del partido Nuevas Ideas.

Ambos candidatos de Nuevas Ideas recibieron los votos de 2,701,725 salvadoreños, un 84.65 % de sufragios válidos lejos de los 204,167 votos logrados por su principal contrincante, Manuel Chino Flores, de la exguerrilla Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).

Un 29.7 % de los votantes de Nuevas Ideas relacionan su decisión con la seguridad del país, ya sea para que continúe el régimen de excepción (15.3), porque ha mejorado la seguridad (12.7) o por el combate a las pandillas (1.7). Un 44.5 % menciona que votó así por los resultados, los cambios, las propuestas o la continuidad, según una encuesta de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (Uca) realizada en abril de 2024.

El gobierno centra parte sus logros en el régimen de excepción, establecido desde el 27 de marzo de 2022 que le ha permitido la captura de más de 80,000 personas acusadas de ser pandilleras.


Concluye licencia de seis meses

El mandatario gozó hasta la medianoche de este viernes 31 de mayo de un permiso especial que duró seis meses otorgado por la Asamblea Legislativa porque así lo requirió el Tribunal Supremo Electoral para inscribirlo como candidato a la reelección presidencial. La licencia le despojó de sus funciones presidenciales aunque no de sus prerrogativas.

Antes de la licencia otorgada, la Sala de lo Constitucional avaló la posibilidad de la reelección inmediata presidencial, al reinterpretar los artículos de la Constitución de la República que la prohibían, resolución que no es reconocida por la oposición, organizaciones no gubernamentales y abogados que argumentan que hay seis artículos que prohíben la reelección y consideran ilegítima la Sala, electa luego de la destitución de su antecesora.

El abogado Juan Contreras aseguró que la reelección de Bukele "les guste o no es la población del pueblo soberano" y condenó "cualquier acto terrorista que quieran hacer", en referencia a dirigentes veteranos de guerra capturados por planificar atentados para el 1 de junio según la Policía Nacional Civil. "Que les caiga todo el peso de la ley, ese mecanismo de terror no es la vía adecuada que la gente quiere, con vocación democrática. En las urnas se cambian las cosas; con terrorismo, no", afirmó en declaraciones a la prensa.

Por otra parte, aseguró que los legisladores de oposición deberían asistir a la sesión solemne porque la Asamblea Legislativa está convocando como un organismo colegiado. Interpretó la ausencia de la oposición como la búsqueda de un "rédito" aunque opinó "no les genera nada". "La oposición en sí no tiene un rumbo y los partidos representados en la Asamblea Legislativa con el tipo de actitudes que toman tampoco tienen rumbo definido", dijo en declaraciones a la prensa.

La oposición, conformada por tres diputados de 60 diputados de la Asamblea Legislativa, anunció que no asistirá porque considera que la reelección es inconstitucional.

Un exmagistrado de la Sala de lo Constitucional considera que "el acceso a cualquier cargo de elección popular no solo deriva del apoyo en las urnas sino del cumplimiento de normas constitucionales y legales que aplican en ese evento electoral". "En tal sentido, el gobierno que asume el 1 de junio solo tiene cumplida parcialmente su validez, la que deriva del apoyo mayoritario en las urnas; pero no tiene la validez que resulta del cumplimiento de las normas constitucionales, pues estas no avalan, sino por el contrario prohíben la reelección", afirmó el abogado.

El vicepresidente de la República, Félix Ulloa, aseguró en una entrevista que la Constitución de la República habilita al presidente para el segundo mandato si se separa del cargo seis meses antes de su primer periodo. "Pero ya no habla de un tercer mandato", dice.

Esa resolución del 3 de septiembre de 2021 que avaló la posibilidad de que el presidente actual se postulara nuevamente como candidato indica que la pérdida de derechos del ciudadano ordenada por la Constitución por la promoción de la reelección procede si se promueve la reelección para un tercer periodo.