El Ministerio de Agricultura reporta que el brote de la langosta de 2015 acabó con 800 manzanas de cultivos de maíz y frijol. / Cortesía MAG


Productores de café, granos básicos, hortalizas, arroz y de caña de azúcar confirmaron que hasta ayer no se reportaba brotes de la langosta centroamericana, mortífera para 400 variedades de cultivos.

Anibar Santos, agricultor de Atiocoyo sur, en La Libertad, aseguró que aún no reportan presencia de esta plaga en las siembras de arroz. Lo mismo confirmó Carlos Arteaga, vocero de la Asociación Nacional de Productores Rurales de El Salvador (ANPRES), quien indicó que mantienen monitoreo en los cultivos de granos básicos y hortalizas en El Paisnal, San Salvador.

Los productores se mantienen en alerta por la advertencia fitosanitaria emitida por el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), sobre la amenaza de un brote de la langosta centroamericana tras las lluvias por las tormentas Amanda y Cristóbal.

Omar Flores, presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal), aseguró que no tienen reportes de presencia de la langosta en las zonas cafetaleras de oriente y occidente.

La agroindustria azucarera salvadoreña tampoco reporta casos de plantaciones afectadas por langostas, pero Julio Arroyo, director ejecutivo de la Asociación Azucarera de El Salvador (AAES), explicó que el sector se mantiene en alerta.

“No hay reportes de langostas. Sí se está monitoreando, pero no se han encontrado poblaciones”, dijo Arroyo. Desde la emisión de la alerta, el sector ha sostenido reuniones virtuales con la Unidad de Sanidad Vegetal del Ministerio de Agricultura y se ha compartido información sobre el monitoreo.

El representante de la Asociación detalló que la especie es activa y que el tema es que no se dispare la población y se causen daños en las plantaciones. Añadió que la verificación y el levantamiento de muestreos es una labor habitual para el cultivo de caña, y hay lineamientos sobre distancias mínimas y niveles de infestación a partir del cual se identifica la categoría del riesgo bajo, medio o alto.

“Si un terreno está solo lleno de maleza y está la plaga, lo que se hace es remover la tierra, porque eso expone los huevos al sol y hace que no nazcan; pero, cuando está en el cultivo, hay controles biológicos, hay un hongo que sirve para controlarla, y luego está el control con químicos que es la fumigación. Si es en pasto, se debe usar insecticidas para no afectar a las vacas y si está en otro cultivo -como caña, maíz, frijol- hay otras consideraciones”, dijo Arroyo.

Por su lado, el Ministerio de Agricultura aseguró que los técnicos de la Dirección de Sanidad Vegetal realizan visitas de monitoreo en los cultivos una vez por semana y se aplica control químico si se encuentran más de 30 individuos adultos en una área de 100 metros.

Esta plaga se reportó por primera vez en El Salvador en 1955. Representa una amenaza para 400 especies de plantas que sirven de alimento, se observa con mayor frecuencia los cultivos de maíz, frijol, sorgo, soya, cacahuate, caña de azúcar, así como tomate, chile, cítricos, plátano, coco, mango y pastizales.