El ministro confirmó que harán pruebas en las personas que asistieron a vela en San Francisco Chinameca. / DEM

El fallecimiento de una persona de 54 años de edad, en el municipio de San Francisco Chinameca, departamento de La Paz, llevó a las autoridades de Salud a reconocer que hay dificultades en el conteo de las muertes por COVID-19 y destacar que lo más importante no son las gráficas, sino la certeza de la información veraz.


En conferencia de prensa, ayer por la mañana, el ministro de Salud, Francisco Alabí, indicó que el Ministerio de Salud tomó la decisión, “desde un principio, que todo paciente fallecido en un centro hospitalario, independiente de la causa, se va a manejar como paciente COVID positivo”.


En ese sentido, afirmó que “pueden suceder inconvenientes como el caso de Chinameca, hubo un inconveniente en la información, sabemos que es una logística, no todo es perfecto”.


“Todas estas muertes se están consolidando, sabemos que hay dificultades en el conteo. Quiero que me comprendan, nosotros estamos día con día actualizando (…), hay que tener prudencia, no es que fallece un paciente e inmediatamente todos los datos se van a cargar, pareciera que lo más importante es ver las gráficas”, señaló.


El ministro anunció ayer que tomarán pruebas para detectar coronavirus a las personas que asistieron a la vela de un fallecido por COVID-19 en San Francisco Chinameca, la semana pasada. La noche del viernes 8 de mayo, la alcaldía de ese municipio informó que en el cantón Concepción Los Planes se veló a una persona que habría muertos por causas naturales el 6 de mayo, pero en medio de su funeral, su familia fue notificadaa que el deceso fue por COVID-19.


Hasta ayer, se habían hecho 90 pruebas de coronavirus en San Francisco Chinameca y se estableció un cordón sanitario en el cantón donde ocurrió la velación.