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Investigadores nipones y alemanes han unido fuerzas para tratar de salvar al casi extinto rinoceronte blanco del norte mediante la producción de óvulos a partir de células madre pluripotente inducidas (iPS, por sus siglas en inglés).

Los científicos de la Universidad de Kyushu y el Instituto de Investigación Zoológica y Natural de Berlín tratan de producir con éxito óvulos para posteriormente fertilizarlos "in vitro" con semen congelado, explicó el profesor Katsuhiko Hayashi, de la institución nipona, en declaraciones publicadas por la agencia Kyodo.

Un vez logrado, el equipo fecundaría a una hembra de una especie cercana, posiblemente un rinoceronte blanco del sur, expuso Hayashi.

"La puesta en práctica llevará mucho tiempo", dijo el científico, dado que los datos existentes al respecto son escasos.

Hayashi, quien ha logrado producir con éxito óvulos de iPS de un ratón del que nacieron crías, declaró que ha proporcionado al equipo alemán orientación técnica para proceder con la investigación.

El rinoceronte blanco del norte se encuentra en grave peligro de extinción; actualmente sólo quedan tres ejemplares con vida (un macho y dos hembras) que viven en el parque de conservación de Ol Pejeta en Kenia.

Los embarazos naturales entre ellos desde que llegaron al paraje en 2009 han sido inexistentes, ya que la especie, incluso en zonas donde está protegida, presenta una tasa de natalidad muy precaria, por lo que la comunidad científica internacional está apostando por el uso de células madre germinales para tratar de salvaguardarlo.

El rinoceronte blanco del norte es originario de la sabana africana y en los años 60 tenía una población de unos 2.300 ejemplares.

El número de estos mamíferos se ha reducido drásticamente debido a la caza furtiva -que busca principalmente sus cuernos- y los conflictos en la región.

No se ha confirmado la presencia de ningún ejemplar salvaje de rinoceronte blanco del norte desde 2006.