El ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, manifestó ayer que la banca salvadoreña está “afligida” ante la incertidumbre en torno al pago de las Letras del Tesoro Público (Letes) que vencerán en lo que resta del año, y aseguró que el Ejecutivo necesita $950 millones para honrar estos y otros compromisos de deuda.

Las Letes son instrumentos que se conocen como la “tarjeta de crédito” del Gobierno. No requieren de la aprobación de la Asamblea Legislativa para emitirse y se utilizan para cubrir los problemas de caja. Generalmente son adquiridas por la banca salvadoreña, a quien el Ejecutivo adeuda, según el ministro, unos $650 millones.

“La banca está afligida. Yo lo que les pido es hacer un ‘rollover’. Lo que la banca no va a hacer es darme nuevos Letes. Ellos tienen razón, ellos tienen el problema. Pero siempre hay bancos que nos apoyan, yo vivo agradecido con toda la banca por ese soporte”, dijo a periodistas, a su salida de la Telecorporación Salvadoreña (TCS).

El funcionario aseguró que para finalizar el año fiscal 2017, Hacienda urge $950 millones, de los cuales “necesito $300 millones en efectivo, más $650 millones que necesito que me den la autorización para ir a buscar quién me presta dinero y hacer el canje de la deuda de corto plazo a largo plazo”, indicó ayer, durante la entrevista Frente a Frente, de TCS.

El ministro enfatizó que para los $650 millones tendrían que colocarse en el mercado internacional, pero el deterioro que ha sufrido el perfil crediticio del país le impediría hacer la operación de inmediato. “Tengo que ir (a los mercados) el año entrante para conseguir tasas de interés adecuadas, pero los bancos ya tendrían seguro que se les va a pagar”, indicó.

Tras el impago de abril pasado, las calificadoras de riesgo expresaron su preocupación sobre el pago de las Letes que se vencerán este año, pues consideran que la banca tiene un margen limitado para continuar absorbiendo más este tipo de instrumentos.

Recientemente, Raúl Cardenal, presidente Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa), señaló que cuando un país cae en impago, “se dificulta al deudor conseguir fondos adicionales”.

 

Ya pagaron CIP de julio

El funcionario informó que el Ministerio de Hacienda ya depositó en las cuentas de los cotizantes de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) los $47 millones adeudados por los Certificados de Inversión Previsional (CIP), cuyo vencimiento estaba programado para este mes.

Los CIP son instrumentos que el Gobierno utiliza para pagar las pensiones del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y el Instituto Nacional de Pensiones de los Empleados Públicos (INPEP). Son emitidos cada tres meses por el Fideicomiso de Obligaciones Previsionales (FOP). Las AFP están obligadas por ley a comprarlos, con los ahorros de los trabajadores.

Dado que sus vencimientos son trimestrales, en octubre el Ejecutivo tendrá que pagar otros $80 millones en CIP, para lo cual Hacienda no tiene definido de dónde saldrá el dinero.

“Yo esperaría que se dé la reforma de pensiones lo antes posible para que allí se resuelva el problema de ese pago”, indicó el funcionario.



$900 Millones

Hacienda indicó que necesita $950 millones para finalizar 2017, de los cuales $300 es en efectivo y $650 en bonos.



$80 Millones

El Ejecutivo debe pagar por el servicio de la deuda previsional en octubre próximo “alrededor de $80 millones”, según Cáceres.