El consumo anual de los productos derivados del petróleo al término de 2017 experimentó un crecimiento anual de apenas 0.27 %, equivalente a 1.54 millones de galones adicionales a los adquiridos durante 2016, según el Ministerio de Economía (Minec).

Las estadísticas de la Dirección de Hidrocarburos y Minas, del Minec, indican que, tanto los automovilistas salvadoreños, como las empresas y el Gobierno adquirieron más de 555.33 millones de galones de combustible.

La cifra equivale a 1.54 millones de galones más que los 553.79 millones registrados en 2016, apenas 0.27 % más. A excepción de 2014, cuando el consumo bajó casi 37 %, la de 2017 es la tasa de crecimiento más baja que se registra desde 2012. En ese año aumentó 55.2 %, indican los datos oficiales y en 2013 avanzó 9.93 %. En 2015 creció 67.63 % y en 2016 reportó una tasa del 4.5 %.

 

Consumo afectado por precios

Sergio Recinos, presidente de la Asociación de Empresarios Distribuidores en Estaciones de Servicio (Adepetro), explicó que el incremento sostenido en el precio del crudo a nivel internacional, “conllevó a un decremento en el consumo a nivel general de todos los productos y en dinero se traduce en mayor cantidad que le cuesta al país importar esos hidrocarburos”.

El Gobierno registró la mayor reducción en su consumo. Las estadísticas señalan que bajó 59.3 % al reportar 155,483 galones, es decir, 227,322 menos que los 382,805 reportados en 2016.

El segundo sector que disminuyó más su consumo corresponde a las empresas generadoras de energía eléctrica, que adquirieron 3.31 millones de galones menos respecto a 2016 y reportaron 9.14 millones de galones consumidos durante 2017.

Los consumidores industriales, por su parte, compraron 55.81 millones de galones de combustibles al cierre de 2017, 10.82 millones menos que los 66.63 millones consumidos en 2016, según el Minec. Esto implicó una caída del 16.24 %.

 

Factura petrolera

A pesar del leve crecimiento en el consumo de combustibles, El Salvador pagó en 2017 un total $175.7 millones adicionales por las importaciones de los derivados que en 2016, según las estadísticas del Banco Central de Reserva (BCR).

La factura petrolera acumulada entre enero y diciembre de 2017 superó los $1,289.4 millones, un crecimiento anual del 15.8 % comprado con los $1,113.7 millones de 2016.

Pese al aumento, el costo de la factura petrolera sigue debajo del récord de $1,977.75 millones reportado en 2013.

Según el BCR, al cierre de 2017 se importó más de 2,485.7 millones de kilogramos entre todos los derivados de petróleo, unos 212.6 millones de kilogramos menos que los 2,698.3 millones de 2016.

Los principales productos que importó el país durante 2016 fueron gasolinas, diésel, gas licuado y bunker C, que constituyen el 80 % de la factura petrolera, indicó el BCR.