Segundo, varios de ellos confiesan que no tienen ninguna idea de lo que es el Tribunal, cómo se hacen elecciones y muestran total desconocimiento de la legislación electoral. Alguno de ellos incluso llegó a comparar el TSE con una junta directiva de la autónoma donde estuvo dirigiendo. Como si hacer elecciones es de soplar y hacer botellas.
Son muy pocos los que se pueden rescatar de los que han pasado hasta ahora.
Una vez más los partidos nos muestran una gran irresponsabilidad al proponer a personajes que desconocen lo elemental. Los partidos quieren incondicionales, no personajes independientes y pensantes que puedan cuestionar su conducta.
La ciudadanía tiene que estar vigilante sobre los próximos magistrados del TSE. Serán los encargados de organizar las elecciones de 2021 y 2024, además, los encargados de dirimir cualquier disputa. ¿Serán capaces?