El apoyo familiar también es clave para la vacunación

Los adultos mayores que se han vacunado hasta hoy destacan que la asistencia de sus familias para hacer la cita y para llevarlos a los centros de vacunación ha sido la mejor aliada.

Ochos personas consultadas por Diario El Mundo expusieron que no habían agendado la cita por sí mismos, un ciudadano incluso relató que no sabía escribir y que esto los llevó a pedir ayuda a su familia más cercana, porque él tenía el deseo de vacunarse, para esto sus parientes se dieron a la tarea de escribirle en un pedazo de papel el lugar donde iba a ser vacunado y los datos generales de la cita para que no se equivocara.

En otros casos, la personas relataron que esperaron a los promotores de salud, pero ante la ausencia de los mismos, amigos optaron por verificar si estaba inscrito y le dieron la noticia que al día siguiente debía de trasladarse al hospital El Salvador para ser inoculado.

Manuel Chávez de 66 años relató que tuvo que movilizarse desde las 9:30 de la mañana en buses públicos, ante la ausencia de puntos de transporte en la zona de La Libertad donde reside, sin embargo junto a su esposa, aseguró que el proceso fue rápido y eficiente, incluso fueron atendidos dos horas antes de la cita pactada.

“Ayer hice la cita, mi hija me la hizo, ella habló para acá y solicitamos la cita para ahora. Yo quería vacunarme y por eso me la hizo”. Luis Ayala, 68 años de edad

“Yo vine a las 11:30 y en 10 minutos (me vacunaron), fue todo lo que pasé ahí, en bus me vine, porque vengo desde La Libertad”, expresó agradecido Chávez.

Además, personas como Amelia Lemus de Portillo, de 62 años, señalaron que a pesar de no manejar la tecnología fueron sus hijos los que agendaron la cita el día de miércoles, ante el deseo de ella y su esposo Ricardo Portillo de vacunarse.

“Ayer hicimos la cita, nosotros pensamos que la iban a dar a los ocho días, pero la dieron para ahora”, manifestó Lemus.

 

Temor.

José Morales, a sus 88 años de edad, aseguró tener “temor de vacunarse”, porque posee afectaciones cardíacas que lo hicieron dudar en su momento si someterse o no al proceso, pero que agendó su cita luego de visualizar por televisión a otras personas de la tercera edad vacunándose. Morales motivó a otras personas longevas que tienen miedo para que realicen su cita, y se vacunen contra el covid-19.

En la experiencia de Berta García de 65 años, la programación de la cita fue por medio de la asistencia de especialistas en salud ubicado en una Unidad Comunitaria de Salud Familiar, los cuales le informaron que estaba programada para este día y procedieron agendar la cita.

La mayoría de los entrevistados aseguraron que reservaron hace uno o dos días su cita y que fue un proceso rápido.