INSTITUTO IBEROAMERICANO DE DERECHO CONSTITUCIONAL
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
CORRESPONDENCIA DEL PRESIDENTE
Ciudad de México, 10 de octubre de 2016
Dr. René Fortín Magaña
Presidente de la Sección Salvadoreña
Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional San Salvador
Presente
Muy distinguido Señor Presidente:
Hasta la sede internacional del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional que me honro en presidir, han llegado noticias acerca del acoso institucional y material que está soportando la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia de su país.
El Salvador, por el que guardamos tanto respeto y admiración, viene de sufrir una larga guerra civil que concluyó con los Acuerdos de Paz, el 16 de enero de 1992; y, después de varios recambios gubernamentales por la vía electoral, sigue esforzándose por lograr a plenitud del Estado Democrático Constitucional de Derecho.
Considerando que uno de los elementos esenciales de dicho Estado es la división de poderes, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia ha resuelto con apego a la Constitución múltiples casos que se le han presentado.
La Sala de lo Constitucional ha emitido sentencias que han producido cambios al sistema electoral salvadoreño; también se han pronunciado sentencias sobre la limitación que debe existir en la partida de gastos imprevistos en el Presupuesto General de la Nación, además de diversos fallos sobre la necesidad de realizar nombramientos de funcionarios honestos y competentes para dirigir las instituciones públicas salvadoreñas. Una de las sentencias más recientes, ha desencadenado una campaña calumniosa contra la Sala de lo Constitucional.
En virtud de lo anterior, apoyamos a la Sección Salvadoreña del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional en su lucha por defender el Estado Democrático Constitucional de Derecho en su país, con la confianza de que, en unión con la sociedad civil, lograrán superar las expresiones de intolerancia que atentan contra los principios y disposiciones de la Constitución democrática de 1983.
Haremos extensivo este apoyo dándole amplia divulgación a través de nuestros miembros y secciones nacionales de Iberoamérica, en cumplimiento del objetivo de estudiar y defender el Derecho Constitucional que este Instituto se trazó desde su fundación en 1974, en la ciudad de Buenos Aires.
Exhortamos a la Sección Salvadoreña a continuar en su lucha por defender los altos principios del derecho, como la mejor vía para el progreso integral de nuestros pueblos.
Diego Valadés.