Julio Olivo, presidente del TSE, es favorito del FMLN para la reelección. / DEM


Cuatro días después de que Medardo González, secretario general saliente del FMLN, conociera que Óscar Ortiz fue electo como el nuevo secretario general del partido, envió una carta a la Asamblea Legislativa para proponer a Julio Olivo como candidato a magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para el periodo 2019-2024.

La carta fue firmada por el aún máximo dirigente del FMLN el 20 de junio, cuatro días después de las elecciones internas del partido de izquierda, y recibida por la directiva legislativa el 21.

González propone tres candidatos: Julio Olivo, presidente del TSE, Víctor Manuel Deodanes Renderos, miembro suplente del Consejo Nacional de la Judicatura (CNJ), y Jonatan Mitchel Sisco Martínez, un abogado que está registrado como asesor de la fracción del FMLN con un salario de $1,200.

En la experiencia laboral del currículum de Deodanes Renderos aparece como abogado en libre ejercicio desde 1999, vendedor de mayoreo de distribuidora Latina y encargado de despacho de Toshiba.

Fuentes políticas dicen que el FMLN buscará votos la próxima semana.

 

Elogios a Olivo

El FMLN sostiene que sus candidatos propuestos cumplen con los requisitos constitucionales y lanza elogios a Olivo.

“Cumplen los requisitos constitucionales, legales y éticos para desempeñarse en tan alta responsabilidad, y cumplen, además, el criterio sentado por la anterior Sala de lo Constitucional en el sentido que se respete el derecho de los partidos políticos a proponer personas para dichos cargos sin afiliación a partido político alguno”, dice la carta que firmó González, quien entregará a Óscar Ortiz la secretaría general el 7 de julio.

Por su parte, Nidia Díaz, jefa de fracción del FMLN, dijo a Diario El Mundo que respaldan a Olivo porque, como presidente del TSE, ha hecho un trabajo “independiente”. “Consideramos que ha hecho su trabajo con ecuanimidad, con independencia de poderes y ha hecho funcionar el sistema”, declaró la diputada. Olivo, crítico de la Sala de lo Constitucional de la generación 2009-2018, fue presidente del TSE en las elecciones municipales y legislativas de 2015 cuya transmisión de resultados preliminares tuvo fallas que él atribuye al voto cruzado.

La Sala de lo Constitucional 2009-2018 exigía comprobación de independencia judicial como requisito constitucional de todo funcionario que ocupa un cargo jurisdiccional, como los magistrados del TSE.