Organizaciones piden a Bukele mantener prohibición de la minería metálica en El Salvador

Preocupación generó esta tarde la publicación del presidente de la República, Nayib Bukele, a favor de explotar la minería metálica en El Salvador en las organizaciones que luchan contra la explotación minera. "Somos el único país en el mundo con una prohibición total de la minería metálica, algo que ningún otro país aplica. ¡Absurdo! Esta riqueza, dada por Dios, puede ser aprovechada de manera responsable para llevar un desarrollo económico y social sin precedentes a nuestro pueblo”, fue parte de lo que Bukele publicó esta tarde. Ante esto la Mesa Nacional Frente a la Minería Metálica en El Salvador (MNFM) y la Alianza Centroamericana Frente a la Minería (Acafremin) expresan su preocupación y le recalcan que "no existe en el mundo ninguna empresa minera que explote oro de manera responsable y mucho menos respetando el ambiente”. Ambas organizaciones emitieron un comunicado, en el que expresan su "preocupación por las intenciones del presidente Nayib Bukele de revertir la prohibición de la minería metálica para que se explote oro en el país, tal como lo asegura mediante una publicación realizada hoy en su cuenta de X... De acuerdo a la publicación del mandatario, con la explotación de oro se transformará El Salvador, cuando es conocido que la minería metálica significa la contaminación del agua y pérdida de la biodiversidad”. Ante esta situación, ambas organizaciones le recuerdan al presidente que la Ley de Prohibición de la Minería Metálica en El Salvador fue aprobada por unanimidad por la Asamblea Legislativa el 29 de marzo de 2017. "Fue el resultado de una lucha social de 12 años de las comunidades amenazadas por las empresas mineras y del rechazo de la población salvadoreña demostrada en varias encuestas de opinión realizadas por el Instituto de Opinión Pública de la Universidad José Simeón Cañas UCA. No fue una decisión absurda sino en defensa del agua y del ambiente", indicaron. Sobre el argumento de Bukele de una explotación responsable, le recuerdan que "ese fue el mismo argumento que utilizó la canadiense Pacific Rim con la campaña de la "minería verde” hace casi 20 años, argumentos que fueron derrotados en octubre del 2016 ante el Centro de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) que dio la razón a El Salvador ante la demanda que la minera interpuso por no otorgarle los permisos para la explotación de las minas”. Lo publicado por el presidente se da en el marco del proceso judicial contra cinco ambientalistas de Santa Marta procesados por un supuesto homicidio en 1989; fueron absueltos por falta de pruebas, la Fiscalía apeló y el miércoles la Cámara de Cojutepeque ordenó repetir el proceso. "El mensaje difundido en redes sociales por el presidente Nayib Bukele y las intenciones de permitir que geólogos de la empresa VanEck investiguen sobre los yacimientos de oro en El Salvador evidencia una vez más que el caso de judicialización de los cinco líderes de ADES y Santa Marta es una estrategia para desarticular al movimiento de resistencia contra la minería metálica y el extractivismo y que se trata de criminalización de las personas defensoras de los derechos humanos ambientales”, exponen las organizaciones.

Demandan mantener prohibición

Ante la posición de Bukele a favor de la explotación minera, la Mesa Nacional Frente a la Minería Metálica y la Alianza Centroamericana Frente a la Minería le demandan "mantener la prohibición de la minería metálica, para proteger la poca biodiversidad que posee el país y a evitar la contaminación del Río Lempa”. También, le exigen al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales y al Ministerio de Economía a cumplir los artículos 2 y 6 de la Ley de Prohibición de la Minería Metálica, que obliga a realizar los cierres técnicos de los 15 pasivos mineros ambientales o minas en abandono que se encuentran en Morazán, San Miguel y La Unión. Por último, piden a las comunidades y distintos sectores de la sociedad "a estar alertas y sumarse a la defensa del agua y del territorio frente a la amenaza de contaminación por la reactivación de la minería metálica en El Salvador y a la comunidad internacional a vigilar y solidarizarse ante las acciones de las empresas mineras en territorio salvadoreño y de las acciones del Estado de El Salvador en detrimento del derecho humano al agua, a un ambiente sano, a la salud y a la vida”.