Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL, durante la conferencia virtual brindada este martes para presentar las proyecciones del impacto económico del COVID-19. /CORTESÍA CEPAL


El mundo que conocíamos hasta febrero de 2020 ya no volverá a la normalidad después del COVID-19, advirtió la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) este martes durante la presentación de sus proyecciones iniciales del impacto de la pandemia para las economías de la región.

América Latina y el Caribe se encuentran en un panorama incierto. La CEPAL prevé que el impacto de la pandemia conduzca a la región a la recesión “más grande que ha sufrido desde 1914 y 1930”. En 1914, la economía cayó -4.9 % y en 1930 la contracción fue de -5 %. Para 2020, el panorama es una recesión económica de -5.3 %.

 

“Los efectos del COVID-19 generarán la recesión más grande que ha sufrido la región desde 1914 y 1930. Se prevé un fuerte aumento del desempleo con efectos negativos en pobreza y desigualdad”, indicó en una conferencia virtual Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL.

La agencia de Naciones Unidas espera que Centroamérica y México sufran una caída de -5.5 % este 2020 pero, al quitar la economía mexicana, solo los países centroamericanos experimentarían una contracción más reducida en -2.3 %.

Se espera, según los escenarios de la CEPAL, que la economía salvadoreña se contraiga -3 % en 2020. De la región, Nicaragua reportaría la peor recesión y agudizaría su crisis –lastrada desde 2018- para una caída de -5.9 %.



Costa Rica tendría una contracción de -3.6 %, para Guatemala se prevé una caída de -1.3 % y en Honduras la recesión sería de -2.8 %. En tanto, se espera un decrecimiento de -2 % para la economía panameña.

Se proyecta que la crisis deteriore los indicadores del empleo formal, con un incremento en la tasa de desempleo de 3.4 % hasta llegar a 11.5 % (viene de un 8.1 % en 2019). Significa que en la región habrían unos 37.7 millones de personas sin una oportunidad para trabajar.



Asimismo, la desigualdad de género “se acentuará”, advierte la CEPAL, porque se aumentará el trabajo no remunerado de las mujeres ante el cierre de escuelas, el aislamiento social y el aumento de personas enfermas.