A 40 años de prisión fueron condenados los cuatro imputados que participaron en el homicidio del inspector Lorenzo Antonio Rojas Herrera y de su hijo Marvin Edgardo Albayero Rojas.

Este es el segundo juicio que enfrentaron, ya que el 24 de mayo del año pasado el Juzgado Especializado de Sentencia “C” de San Salvador, condenó a penas de hasta 65 años de prisión, pero tras una apelación la Cámara Especializada ordenó un nuevo juicio que culminó ayer con una condena menor.

El juzgado determinó que en contra de Heriberto Crespo Salinas, alias “Kiler”; José Alfredo Jiménez Fernández, “Guacalchilla”; Cristian Geovanni Mendoza Hernández “Geovanni”, y Jorge Alberto Hernández Pérez, “Koki”, había suficientes pruebas que los ubica como los responsables del doble homicidio.

La Fiscalía General de la República los acusó de homicidio agravado, pero en la vista pública se modificó y se les condenó como cómplices necesarios del delito. Se les impuso 26 años y 8 meses por el homicidio del oficial de la PNC y 13 años con cuatro meses por haber asesinado al hijo del inspector.

El ataque contra el oficial de la Policía y su hijo ocurrió el 16 de noviembre del año 2016, el cantón San José los Planes, municipio de Quezaltepeque, departamento de La Libertad, cuando los integrantes de la Mara Salvatrucha decidieron asesinar a las víctimas al salir de su casa de habitación y se disponían abordar el vehículo en el que se transportarían hacia su trabajo.

El móvil del hecho fue porque los pandilleros se enteraron que Lorenzo Antonio Rojas Herrera era policía, mientras que de su hijo creían que era soldado.

El criteriado mencionó que uno de los pandilleros que iba participar en el hecho era “chequeo” y como requisito para convertirse oficialmente en miembro de la MS-13 tenía que participar en el homicidio.

Los imputados estaban en libertad pero con brazalete electrónico, ya que en mayo de 2019, cumplieron dos años de su captura.

 

Juicio

23/06/2020

El Juzgado Especializado de Sentencia “C” de San Salvador condenó a los cuatro imputados en un segundo juicio, ya que en la primera vista pública se había impuesto condena de hasta 65 años.