Bryan Pérez, de la modalidad shortboard, se convirtió en el segundo cuscatleco en conseguir una plaza para los Juegos Olímpicos de París. “Me acordé de cuando era pequeño, de un niño que pasaba cuidando carros, con muchas ganas de ser alguien y de poder representar al país en lo más alto del mundo”, dijo el surfista en una entrevista con el Comité Olímpico de El Salvador.

“Desde pequeño siempre había tenido un objetivo y era estar en las Olimpiadas. Cuando me levanto yo tengo escrito cuales son mis metas en el año y esa era la meta número uno, de estar en los Olímpicos y ser el primer surfista salvadoreño en hacerlo”, añadió Bryan.

Además, el salvadoreño mencionó que cuando le dieron la noticia sobre su clasificación a las olimpiadas, fue un momento demasiado emotivo para él y sus allegados. “Pasé llorando todo el día, me hicieron una llamada y yo estaba tomándome un café, estaba rodeado de muchas personas y comencé a llorar y saltar. Le hablé a Marcelo, mi entrenador y le conté llorando. Fue un momento bastante lindo y todavía estoy aquí sin poder creer que voy a las Olimpiadas”, contó Bryan.

También agradeció el apoyo recibido y alentó a los salvadoreños a seguir animando a los demás competidores: “sigan apoyando, El Salvador es un país en el que somos luchadores que queremos lograr muchas cosas y nunca nos rendimos”.