La Fundación Salvadoreña de Apoyo Integral (Fusai) advirtió este jueves sobre las dificultades palpables que existen para la reubicación de negocios desalojados en el centro histórico de San Salvador.

A través de una publicación en el Observatorio Mype, administrado por Fusai, el director del observatorio, Luis Castillo, destaca que los desalojos efectuados en el sector informal, “por promover la modernización urbana”, se han traducido en desafíos para “cientos” de comerciantes.

“Si bien un importante número de estos han sido reubicados en espacios designados por las autoridades municipales, otros han enfrentado dificultades para encontrar nuevas oportunidades de venta”, indicó Castillo en la publicación.

El reordenamiento del sector informal de diferentes municipalidades se ha ejecutado desde hace varios años en El Salvador.

Solo a inicios de marzo, más de 1,000 puestos fueron desmontados durante la quinta fase de reordenamiento del centro histórico de San Salvador.

Fusai reconoce que las autoridades municipales han reubicado a una parte de los comerciantes, pero que un grupo de los afectados aún no encuentra alternativas viables.


Dificultades de las mypes

La institución recordó que este problema se suma a las dificultades financieras que las micro y pequeñas empresas (mypes) deben pasar en El Salvador.

En su análisis del panorama emprendedor, Fusai destacó la reducción de tasas municipales aprobadas recientemente por varias alcaldías del país, una situación que consideran se traduce en un “alivio tributario”.

Fusai prevé que esta reducción de las tasas municipales empuje las inversiones y la formalización de las mypes en El Salvador.

“Los gobiernos locales apuestan por la modernización y la regulación de los espacios públicos; por otro, las realidades de las mypes reflejan un sector que aún carece de las condiciones necesarias para operar dentro de la formalidad sin sufrir pérdidas económicas significativas”, añadió Castillo.

El director del observatorio recomendó la ejecución de políticas públicas con las que se retome un enfoque de integración, en donde se proceda con el reordenamiento sin perjudicar a los comerciantes. Por el contrario, Fusai externa una necesidad de crear oportunidades “concretas” para que los emprendedores puedan escalar a mercados emergentes.

La Fundación sugirió que se sume a las mypes a rutas turísticas, ferias locales, y espacios culturales y gastronómicos en donde puedan comercializar sus productos.

La publicación enfatiza en la necesidad de que la modernización urbana debe proteger la “riqueza cultural” de la actividad económica de El Salvador, en donde se incluyen la venta de artesanías y oficios heredados.

Las mypes son fuente importante de empleos en El Salvador, según Fusai, un 70 % del empleo informal se concentra en este sector empresarial, en donde se enfrentan a la modernización.

El sector también lidia con que seis de cada 10 no están registradas formalmente, alejándose del impacto de las políticas y estrategias estatales.