La Alcaldía de San Salvador inició el fin de semana una tercera etapa de lo que llaman “recuperación del centro histórico” capitalino, retirando a centenares de ventas informales en un amplio sector de las calles y aceras.

Según el alcalde capitalino, Mario Durán, ya se movieron más de 3,000 puestos de ventas informales. Así se retiraron estructuras que causaban desorden en el centro de la capital para reordenar los espacios a través de reuniones con los vendedores.

El alcalde dice que unas 68 cuadras del Centro Histórico han sido recuperadas en el perímetro del Centro Histórico y realmente empieza a notarse otra dinámica económica, otro rostro de ese importante sector capitalino tanto de día como de noche.

El reordenamiento, iniciado en abril del año pasado, movilizó a mil vendedores informales de la calle Rubén Darío hacia el nuevo mercado Hula Hula, un moderno centro comercial, limpio y seguro que vale la pena visitar. Eso demuestra que se puede cambiar el centro y darle a los vendedores informales opciones dignas y seguras para su labor.

La comuna ha anunciado también otras obras como el cableado subterráneo, la mejora de aceras y otras obras estéticas, que son importantes para presentar una imagen más limpia de la ciudad, que eventualmente puede atraer inversiones de calidad en negocios e incluso en desarrollos inmobiliarios que recuperen viviendas y edificios en el centro.

Todo proyecto de esta naturaleza es ambicioso y cuesta mucho dinero, también genera resistencia y reclamos, pero las experiencias de otras ciudades latinoamericanas demuestra que son inversiones que valen la pena, que no solo modernizan las ciudades sino que ayudan a recuperar su seguridad y a mejorar su dinamismo económico.