El salvadoreño de 37 años fue capturado el pasado 7 de noviembre por agentes de la Oficina de Detención y Deportación (ERO) de Baltimore, quienes lo ubicaron mientras se desplazaba en Cockeysville, Maryland.
"Es un miembro documentado de una pandilla callejera violenta que utiliza nuestras comunidades para esconderse de las autoridades de su país de origen. ERO Baltimore no permitirá que los criminales del mundo usen los vecindarios de Maryland para escapar de la justicia", dijo el director interino de la Oficina de Campo de ERO Baltimore, Darius Reeves.
Las autoridades de ERO detallaron que el pandillero ya había sido arrestado dos veces en El Salvador por delitos de amenazas, agrupaciones ilícitas y portación ilegal de arma de fuego, en los años de 2013 y 2015.
Mientras que en EEUU había sido arrestado por agentes de la Patrulla Fronteriza en mayo de 2011, tras identificarlo que no tenía documentación legal para residir en dicho país. Posteriormente fue deportado a El Salvador en julio de ese mismo año.
ERO aseguró que años después, en una fecha desconocida, el salvadoreño volvió a reingresar ilegalmente a EEUU, sin antes haber sido procesado por entidades migratorias.
Tras ingresar ilegalmente fue arrestado nuevamente en marzo de 2021, en Texas, mientras viajaban junto a su esposa e hijos, pero fue liberado ese mismo día bajo un proceso migratorio abierto.
Al estar en un proceso abierto de deportación por parte de las autoridades fronterizas, el salvadoreño presentó una solicitud de asilo y de suspensión de deportación de EEUU, pero esta fue negada por un juez de migración del Departamento de Justicia de Baltimore.
En febrero del 2023 las autoridades del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) cerraron oficialmente el caso del salvadoreño y ordenaron su recaptura y deportación.
Luego de haber sido capturado hace una semana, el pandillero permanecerá en prisión preventiva en las instalaciones de ICE, mientras reestablecen la orden de deportación hasta El Salvador.