La duquesa de Sussex, Meghan Markle, sigue robando titulares y todo por su rebeldía a seguir las reglas que impone el protocolo real.

Markle se hizo presente a la gala de los premios británicos de la moda en el teatro Royal Albert Hall de Londres para entregar en persona el galardón a la diseñadora británica de ropa femenina del año a Clare Waight Keller, la directora artística de la casa Givenchy que se encargó además de crear el vestido de novia con que la antigua actriz le dio el 'sí quiero' al príncipe Enrique el pasado mes de mayo.



Lo que llamó la atención, además de su vestuario, embarazo y estilo, fueron sus manos. ¡Sí, sus manos!

Parece que la esposa de Harry no quiere o es renuente a seguir las reglas, esta vez se colocó un color oscuro en sus uñas, cuando el protocolo dicta que deben utilizar esmaltes color piel, para que estos no llamen la atención.

Catalina de Cambridge, cuñada de la duquesa de Sussex, por ejemplo, nunca se deja ver en público con las uñas pintadas con un barniz demasiado llamativo excepto en contadas ocasiones, e incluso esas raras veces apuesta por el color rojo solo para su pedicura, que pasa más desapercibida.