“Estuvimos tres semanas allá (en El Salvador), mi mamá estuvo un mes y siempre que llamo es lo mismo, que lo siguen buscando, que no perdamos la fe, y ya van cinco semanas sin saber a dónde está mi hermano”, explica María, la hermana de Tomás, un salvadoreño con ciudadanía estadounidense, que desde hace 40 años migró a Estados Unidos y ha hecho su vida allá.
Tomás desapareció el pasado 24 de marzo, Domingo de Ramos, cuando regresaban de una caminata con su familia de un río ubicado en El Tablón, San Antonio Achichilquito, en San Vicente. La última vez que su familia lo vio vestía una camiseta celeste, una camisa a cuadros encima, y un pantalón café.
“Llegan a este lugar, estando ahí mi hermano, ya está cansado... al estar un rato ahí, mi mamá mira que mi hermano se para en una piedra y como que agarra para arriba, a los cinco minutos que mira eso les dice a los demás: ‘Vámonos porque mi hijo está cansado, se mira como que ya se quiere ir’, mi mamá no pensó nada”, relató María.
La mujer dice que según su madre, Tomás iba caminando delante de ellos, pero al llegar al punto de encuentro, de donde habían partido cerca de las 9:00 de la mañana, él no estaba.
La caminata de regreso duró dos horas y 40 minutos y Tomás no había regresado. Luego de esperarlo en la tarde, la familia decidió moverse a una delegación de la Policía Nacional Civil en San Vicente para poner una denuncia, pero no fue recibida.
La madre de Tomás buscó otra delegación policial, en donde solo les tomaron la denuncia al mencionar que se trataba de un ciudadano estadounidense.
El martes de la Semana Santa, los hermanos de Tomás viajaron a El Salvador para sumarse a la búsqueda, en la que participó la Policía Nacional Civil pero no lo encontraron.
“Nos hemos ido a buscarlo, yo hice esa caminata y aunque él se hubiese lastimado hubiese salido a la calle”, indica María, quien junto a su familia no se explican la desaparición. “Él es una persona muy seria, muy callado, muy humilde”. Tomás trabajaba como supervisor del distrito escolar en una ciudad de Estados Unidos.
La familia de Tomás ya notificó a la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, quienes están pendientes del trabajo de búsqueda que realiza la Policía Nacional Civil y la Fiscalía General de la República en este caso y de momento, ofrecen una recompensa a quien brinde información sobre el paradero de él.
Los desaparecidos en El Salvador
Según el Observatorio Universitario de Derechos Humanos, en 2022, la Policía Nacional Civil registró 692 denuncias por desapariciones y en 2023, pero solo desde enero a junio, registraron 450.Organizaciones de sociedad civil conformadas por familiares de desaparecidos han demandado falta de diligencia de las autoridades en la búsqueda de las personas desaparecidas; al inicio de la implementación del régimen de excepción, familiares de víctimas recibían respuestas de fiscales sobre que no podían dedicarles tiempo a la búsqueda, por estar procesando los casos de las capturas masivas del régimen.