Que mejor hablar de los gobernantes que en ningún momento favorecieron a sus familiares para incorporarlos en un puesto en el gobierno. El nepotismo es la utilización de un cargo para designar a familiares o amigos en determinados empleos o concederles otros tipos de favores, al margen del principio de mérito y capacidad.

Lastimosamente, en El Salvador se siguen viendo en los poderes del Estado esas malas prácticas. Eso se está observando más en la Asamblea Legislativa (AL). Esa mala práctica se heredó y se esperaba que en el presente gobierno ya no se permitiera. El nepotismo enferma a la democracia. No existe una gestión pública en cuanto a transparencia. Siempre sale a luz el nepotismo.

En El Salvador existe la práctica de Ad-honorem, en donde no se comprueba si los contratados están recibiendo sueldos o sobresueldos. En otros gobiernos nos enteramos de una lista de personas que se emplearon gracias al nepotismo. Cuando hay nepotismo desaparece la imparcialidad, la honestidad y la transparencia.

Para que no haya nepotismo en lo familiar, no es necesario solo ver los apellidos, anteriormente, cuñados, nueras, suegras, yernos y amigos llenaron todos los puestos de la Asamblea Legislativa. Para variar eran personas, en su mayoría, no aptas para ocupar cargos de esa índole. Hace poco circuló una lista de personas que fueron contratadas en la Asamblea Legislativa (...). Son puestos por compadrazgo o amistad. Se evidencia que no tienen los estudios pertinentes para estar en esos puestos. ¿Hasta cuándo se terminará el nepotismo en El Salvador?

Es tiempo para creer en la clase política; empero, no hay transparencia, no existe una verdadera democracia. Para que un gobierno funcione bien debe de haber claridad en los puestos que se agencian. En la Asamblea Legislativa en El Salvador nombraron plazas para asesores, comunicadores, etc., los cuales no tienen las competencias ni habilidades. ¿Qué sucede con los profesionales en Ciencias Políticas o Ciencias Jurídicas?

Lógicamente, para optar a un cargo de asesor se deben tener los estudios para planificar y ejecutar políticas que ayuden al desarrollo del país. En la AL hay comisiones en donde se discute todo el engranaje del desarrollo del país. Es necesario que haya un ordenamiento. Anteriormente, se observaba en los medios de comunicación que los diferentes partidos políticos discutían las leyes. Ahora ni eso hacen. Solo se aprueban leyes sin analizarlas.

Es interesante saber que países como Francia implementaron leyes más duras para implementar el nepotismo. Algo importante es que también en Estados Unidos hay una ley que impidió que Trump, cuando fue presidente, designara a su hija y yerno para asesores. Siempre he admirado al expresidente uruguayo José Mujica, quien no anduvo incorporando a familiares o amigos en su gobierno; además, promulgó la austeridad. Chile, Costa Rica y Uruguay son ejemplos en donde no existe el nepotismo.

El nepotismo es corrupción, es ver que los funcionarios se aprovechan de sus puestos para ayudar a otros. Lo contrarío al nepotismo es la meritocracia. Lo justo es que se contrate a profesionales y a otro personal que no tengan nada que ver con el favoritismo.

¿Existe una ley de nepotismo en El Salvador? En el 2006 se logró establecer, gracias a la Ley de Ética Gubernamental LEG, que se sancionaba a los que cometiesen esa mala práctica. La LEG, desde que se promulgó en la AL en el año 2018 “establece como prohibición ética que los funcionarios públicos contraten, nombren, promuevan o asciendan a parientes por consanguinidad, afinidad, cónyuge o convivientes... En el cual el funcionario público otorga un empleo sin importar que la persona se encuentre calificada o no para el cargo...”.

Lo anterior es lo que no se ha cumplido en los gobiernos anteriores. En el actual gobierno sigue practicándose descaradamente el nepotismo. Así no saldremos adelante. Hay cientos de profesionales capaces, aptos y con honorabilidad que pudieran emplearse meritocráticamente. Basta ya de ver esas corruptelas.


Fidel López Eguizábal es docente investigador Universidad Francisco Gavidia
flopez@ufg.edu.sv