La economista Lourdes Molina cree que la situación económica de El Salvador no es maravillosa como lo busca hacer ver el gobierno, ya que el país está en desaceleración económica, sigue dependiendo de las remesas familiares y se enfrenta a grandes desafíos como la reducción de la pobreza, la desigualdad, el empleo, el cambio climático y el debilitamiento democrático.

La coordinadora de país del Icefi cree que la apuesta debería ser una transformación productiva con innovación tecnológica, economía verde y sostenible, mayor inversión en educación y salud, sin recortes, y un sistema de pesos y contrapesos que dé certeza a los inversionistas, algo que ve indispensable para la atracción de inversiones.

¿Ve logros económicos en el gobierno y cuáles?
Con base en la narrativa gubernamental pareciera que la situación económica del país es maravillosa, pero al remitirnos a los indicadores oficiales técnicamente es muy difícil hablar de logros. El Salvador está en un proceso de desaceleración económica y, este año, nuevamente, será el país de la región centroamericana que menos crecerá (2.2 %, según las proyecciones del Fondo Monetario Internacional, FMI, y 2.1 %, según la Cepal), seguimos siendo un país con déficit de balanza comercial y una alta dependencia de las remesas familiares. Además, hay factores concretos y tangibles para la población como el aumento del costo de la vida que hacen evidente que la situación económica está lejos de ser como los discursos afirman.

¿Cree que el gobierno tiene una apuesta económica?, ¿es el turismo?
Es muy difícil identificar las apuestas o prioridades de este gobierno, en especial porque a pesar de que ya van más de 4 años y medio de la actual administración el plan general de gobierno o el plan de despegue económico siguen sin ser de conocimiento público. Parece que no hay un sentido estratégico en el gobierno, un día pareciera ser que la apuesta es el turismo, otro, el bitcóin o cualquier actividad económica.

¿Cuál cree que debería ser la apuesta económica en El Salvador?
Adoptar medidas que permitan avanzar en una transformación productiva, que contribuya a generar más y mejores fuentes de empleo con base en sectores estratégicos con sendas de crecimiento bajas en carbono, que promuevan la innovación tecnológica y permitan construir una economía inclusiva, verde y sostenible.

¿Cuáles son los principales desafíos económicos a los que se enfrenta el gobierno los próximos años?, ¿la situación fiscal?
La situación de las finanzas públicas seguirá siendo uno de los principales desafíos. A esto deberá sumársele la reducción de la pobreza, la desigualdad, la generación de empleo de calidad y enfrentar los impactos económicos del cambio climático. Todo esto en un contexto de debilitamiento democrático y concentración del poder.

¿Cómo El Salvador podría atraer inversiones que no sean especulativas como el bitcóin?
Para ello desde el gobierno se deberían priorizar inversiones públicas que fortalezcan factores clave para la atracción de inversiones, por ejemplo, en educación, salud, protección social e infraestructura económica que además de garantizar derechos permita contar con una fuerza de trabajo calificada y con un mercado interno fortalecido. También se deberían realizar esfuerzos para promover inversiones públicas en investigación, desarrollo e innovación que permita mejorar la capacidad productiva del país. Pero sobre todo se debe reconocer que para un clima de atracción de inversiones resulta indispensable fortalecer el estado de derecho, la independencia entre los poderes del Estado y un sistema político con pesos y contrapesos que funcionen adecuadamente que dote de certeza a los inversionistas.

¿Cree que hay esperanza en que el bitcóin genere ganancias al gobierno, con la más reciente alza?
A más de dos años de su implementación es claro que la adopción del bitcóin no se ha traducido ni en más crecimiento, inversión o empleo; por el contrario, solo ha significado costos para la sociedad salvadoreña, la administración Bukele utiliza recursos públicos para especular, una absoluta irresponsabilidad en un contexto en el que la pobreza extrema está aumentando y más de la mitad de salvadoreños y salvadoreñas no come adecuadamente.

¿Cómo describiría la situación fiscal del país?
Como una situación crítica que impide que la política fiscal se convierta en una herramienta para el desarrollo del país y el bienestar de la población. A pesar de que se ha logrado aumentar los ingresos del Estado, estos siguen siendo recaudados de manera regresiva, pues las personas con menos ingresos terminan pagando proporcionalmente más impuestos. Adicionalmente, se siguen otorgando privilegios fiscales injustificados. En el ámbito del gasto público sigue sin contarse con un presupuesto vinculado a resultados, se observan serios retrocesos en materia de transparencia y rendición de cuentas. Por si esto fuera poco, el pago de la deuda pública continúa siendo la principal partida presupuestaria, absorbe alrededor de la cuarta parte del presupuesto, lo que implica que hay menos recursos para inversiones sociales claves como salud o educación. Además, es importante tener en cuenta que este gobierno ha demostrado su disposición a realizar recortes en estas áreas fundamentales.

¿Cómo describiría el estado de los sistemas previsionales de la región?
Son sistemas insuficientes, que tienen poca cobertura, solo 1 de cada 4 personas centroamericanas tienen acceso al sistema previsional. En contraposición, son sistemas con serios desafíos de eficiencia y sostenibilidad financiera que en la mayoría de los casos supone mayores presiones para las finanzas públicas de los países. Y, lamentablemente, cuando se impulsan reformas previsionales estas no son integrales y suelen concentrarse en atender los problemas financieros, mas no plantean medidas para garantizar el derecho a la seguridad social.

¿Por qué cree que siempre El Salvador está a la cola del crecimiento en Centroamérica?
Hasta el momento ningún gobierno ha sido capaz de enfrentar los problemas económicos estructurales del país como la debilidad del sistema educativo, la falta de infraestructura económica y social, la dependencia de las remesas, la falta de diversificación productiva, la persistencia y profundización de las desigualdades sociales y por supuesto la insostenibilidad de las finanzas públicas.

En el contexto actual, a los factores ya mencionados, debe sumarse el impacto que el contexto político y el debilitamiento democrático tienen en el desempeño económico.

Por ello resultan importantes tanto las respuestas de política económica que desde el estado salvadoreño se den a estos desafíos, como el respeto del estado de derecho y de la institucionalidad democrática por parte de las autoridades gubernamentales.

Todos los años se aprueba un presupuesto diferente al real. ¿A qué cree que responde ese rediseño presupuestario que vemos todos los años?
Realizar modificaciones presupuestarias es algo normal, puesto que a lo largo del período fiscal el gobierno puede enfrentar situaciones no previstas o para fortalecer sus apuestas estratégicas. Pero en el caso de El Salvador, las recurrentes modificaciones presupuestarias obedecen más a las dificultades de financiamiento de la actual administración. Se ha priorizado el pago de la deuda y el financiamiento de gastos de propaganda gubernamental, incluyendo concursos de belleza e inversiones en criptomonedas, mientras que áreas claves para el bienestar de la población, como la educación y la salud son víctimas de recortes. Los cambios recurrentes al presupuesto son señal de que al final esos rediseños evidencian que el gobierno salvadoreño carece de un plan estratégico de desarrollo al que se pueda vincular el presupuesto público.

Las encuestas indican que el principal problema del país es económico. ¿Ve una propuesta económica de Nuevas Ideas y la oposición?
Ojalá que en este período electoral los diferentes partidos políticos presenten una oferta electoral que esté a la altura de los desafíos económicos del país, que no se limite a decir que van a enfrentar estos desafíos sino que especifiquen cómo, con cuáles medidas de política económica, especificando a su vez cuántos recursos utilizarán para implementarlas y cómo planean financiarlas.

¿Cuál es el escenario económico que ve después de las elecciones de 2024?
Dependerá del resultado de las elecciones. Si se confirma lo que dicen las encuestas, el contexto político de mayor concentración de poder y adopción de prácticas antidemocráticas es el que determinará la situación económica en los próximos años. El escenario económico también dependerá de cómo las autoridades electas gestionen la política económica, si se siguen tomando decisiones con base en la improvisación y los intereses particulares, o si se utiliza como herramienta para promover desarrollo y garantizar derechos.

El perfil

Lourdes Molina, coordinadora de país para El Salvador y Honduras del Icefi
Estudios: Licenciada en Economía en la Universidad de El Salvador, estudios de maestría en Economía Ecológica, en el Centro Internacional de Política Económica de la Universidad Nacional de Costa Rica.
Experiencia: economista investigadora del Icefi, docencia universitaria, coordinadora de proyectos de transparencia fiscal, entre otros.