Las obras en el segmento tres iniciaron en el primer trimestre de este año. / David Durán


Tras el hallazgo de las irregularidades en la proceso de construcción, el ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, aseguró ayer por la tarde a Diario El Mundo que el pasado seis de septiembre caducó el contrato con la compañía UDP Concrescol- Eben Ezer, misma que estaba a cargo del segmento tres del bypass de La Libertad, el cual “está tirado” en este momento.

En mayo pasado, la empresa constructora abandonó el proyecto, porque- según Rodríguez- había contratado a otras compañías para la ejecución del mismo y “no les habían pagado”.

El ministro indicó que encontró la construcción con 18 % de avance y tras conocer las irregularidades caducó el contrato el pasado seis de septiembre. Explicó que la compañía tuvo su tiempo para una audiencia y presentar sus pruebas.

Actualmente no se ejecutan obras en el segmento tres, únicamente en el segmento uno, que está a cargo de la empresa Meco, y en el dos, que es responsabilidad de la constructora Fessic.

“El segmento tres es el segmento que está tirado, en toda la parte después del viaducto no se está haciendo ninguna obra y la inversión sería más o menos de $17 millones”, afirmó Rodríguez.

El segmento tres comprende la construcción de 3.24 kilómetros de carretera nueva, con un derivador a nivel, que conecta con la carretera Litoral, más interconexiones de 0.8 kilómetros. Aunque esa es la parte donde se han identificado más irregularidades, Rodríguez reconoció que los reparos de la Corte de Cuentas también señalan anomalías en el segmento uno y dos del proyecto de construcción del bypass.

“En el segmento uno no se hizo un uso adecuado del anticipo, en el segmento dos de igual manera, no se hizo uso adecuado del anticipo y adicionalmente se hicieron tres estimaciones extemporáneas, se hicieron tres pagos fuera del tiempo”, señaló.

El bypass de La Libertad fue dividido en tres segmentos de construcción y toda la obra tiene un costo de $61. 1 millones.